La Fiscalía investiga la posible relación del falso médico Coté con un conservante alimentario

C. López / F. Molezún FERROL

FERROL CIUDAD

La AIMS cree que el imputado por intrusismo médico puede estar incurriendo en un quebrantamiento de las medidas cautelares

05 nov 2015 . Actualizado a las 20:30 h.

La Fiscalía de Ferrol ha abierto diligencias de investigación penal sobre la posible relación del falso médico ferrolano José Manuel López Pérez, Coté, con un conservante alimentario que se está comercializando en toda España. La voz de alarma la dio en el pasado mes de julio la asociación de Afectados por Intrusismo Médico Sanitario (AIMS), que, tras cinco años de seguimiento, asegura haber descubierto que Coté tiene la patente de un produzco para la conservación de todo tipo de alimentos y lo puso en conocimiento de la Fiscalía provincial.

La denuncia fue rebotada a los fiscales de Ferrol, que resolvieron abrir las oportunas diligencias de investigación.

La presidenta de AIMS, Esther Fontán, compareció en rueda de prensa en A Coruña, junto con el abogado de la asociación, para informar sobre el asunto, a raíz de que la Fiscalía hubiese comunicado al afectado el trámite que se está siguiendo.

El letrado de Sierra Abogados que representa a AIMS apunta la posibilidad de que exista un quebrantamiento de las medidas cautelares dictadas contra Coté, que le impiden dedicarse a cualquier cuestión relacionada con el mundo sanitario o parasanitario. Estiman que no debería figurar como titular de las patentes de estos conservantes alimentarios ni ocuparse de su distribución y comercialización, de ahí su solicitud a la Fiscalía para que investigue si podría haberse producido dicho quebrantamiento.

Desde AIMS insisten en que no quieren levantar alarma social: «No podemos afirmar que exista una alerta sanitaria, pero se trata de un producto patentado por alguien que no tiene ninguna titulación que le acredite para ello. Además, los resultados del análisis al que se han sometido a este conservante arrojan la presencia, en cantidades mínimas, eso sí, de metales pesados como el mercurio, el plomo, arsénico y cadmio», apunta Esther Fontán, que dice esperar que las empresas que han adquirido el Presserfood, «entre las que está el Centro Tecnolóxico da Carne, adopten las medidas legales pertinentes cuando se enteren de su procedencia».

La presidenta de la asociación asegura que la empresa comercializadora, en cuyo organigrama directivo no figura Coté, aunque la patente sí está a su nombre, tiene su sede administrativa en A Coruña y varias delegaciones en la costa mediterránea. Añade, además,  que tienen conocimiento de que Coté estuvo en varias ferias exponiendo las bondades del citado conservante, que está siendo adquirido por más de 200 empresas españolas, desde pequeños productores a grandes firmas con cadenas propias de marca.