Un año con las calles pintadas pero sin regular el aparcamiento

FERROL CIUDAD

Señal de aparcamiento exprés en la plaza de Armas, que todavía no ha entrado en vigor.
Señal de aparcamiento exprés en la plaza de Armas, que todavía no ha entrado en vigor. josé pardo< / span>

Algunas señales siguen a la vista causando confusión entre los conductores

10 oct 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Las calles del centro de Ferrol cumplen un año con el pintado multicolor en los bordillos. Líneas naranjas, verdes, azules y amarillas debían servir para marcar las limitaciones de un nuevo sistema de aparcamiento en superficie vinculado a la entrada en vigor la Ordenanza Reguladora de Estacionamiento (ORE). Doce meses después del polémico pintado, tanto por su futura función como por su ejecución -negocios del centro se quejaron por el cierre de manzanas completas donde no se podía aparcar pero sin aviso previo- esas marcas siguen ahí. Pero no sirven para nada. Y lo único que consiguen es generar confusión entre los conductores, especialmente entre aquellos no habituales.

Quienes a diario frecuentan el callejero de A Magdalena saben bien que ninguna de las marcas está activa realmente, a excepción, de la carga y descarga. La norma no ha entrado en vigor porque no ha llegado a ser aprobada definitivamente. Y por tanto, la Policía Local no multa aunque se utilicen estas plazas el tiempo que se considere oportuno. Ni siquiera la de la zona azul, la más veterana en Ferrol, que hace años sí era más o menos controlada por los agentes. Y aunque se rigiera por el por ortodoxo método de dejar en el salpicadero un papel cualquiera con la hora de llegada.

Todavía es frecuente la pregunta de si se puede aparcar o no en esas áreas pintadas. Y a la confusión contribuye la existencia de las señales que acompañaron posteriormente al pintado, donde se recogen las limitaciones temporales. Algunas se han tapado de forma endeble, con plásticos transparentes que permiten ser leídas. Otras, ni siquiera eso y se muestran totalmente a la vista, como si estuviesen en vigor.

Tras llegar al gobierno ferrolano, el alcalde, Jorge Suárez, defendía en junio la elaboración de una nueva ordenanza para regular el estacionamiento en el centro de la ciudad. Apostaba por mantener la gratuidad de las plazas en las calles de Ferrol y la tolerancia en cuanto a las multas, para que el Concello no actuase como recaudador. Desechaba también borrar las marcas viales hasta tener claro qué tipo de regulación se establecerá. Pero lo que sí se haría, dijo entonces, sería adoptar medidas inmediatas para evitar la confusión por la señalización.