«Covas es un auténtico paraíso»

FERROL CIUDAD

Paloma Lago en uno de sus rincones favoritos
Paloma Lago en uno de sus rincones favoritos Cedida

La modelo disfruta del verano junto a su familia en la parroquia ferrolana

30 ago 2015 . Actualizado a las 09:50 h.

Da igual que casi todos los días de la última semana hayan amanecido lluviosos, como si el otoño se empeñase en llegar antes de tiempo. Que el cielo se haya pintado de gris y que en algunos momentos hasta hiciese falta echar mano de los calcetines. A Paloma Lago todo eso le da igual. Porque a ella le basta con estar en Covas para disfrutar del verano. «Mi trabajo está en Madrid, pero mi tiempo de expansión y relax están aquí sin ninguna duda», dice sonriente la modelo y presentadora ferrolana.

Lejos del ajetreo y el bullicio de la gran ciudad -Paloma vive en el barrio madrileño de las Cortes, a dos pasos del Palacio de Congresos y del Círculo de Bellas Artes-, esta ferrolana de pura cepa disfruta de lo lindo en la casa que hace ya ocho años se construyó en la parroquia de las playas de arena blanca, mar batido y viento caprichoso.

«Para mí, Covas y sus alrededores son un auténtico paraíso: la combinación perfecta entre la actividad y el descanso. Puedo hacer mil cosas o ninguna y estar igual de feliz... Y que haga sol no es una condición para lograrlo», comenta encantada. Ni siquiera el más encapotado de los cielos es capaz de amedrentar a presentadora ferrolana. «Cuando está nublado aprovecho para caminar de punta a punta por las playas y si sopla el viento de un lado del faro del cabo Prior me voy al otro lado, donde el mar está en calma».

Pero es que cuando sale el sol tampoco hay quien la pare, porque ella no es de las que les gusta reposar en la tumbona durante horas y horas. En lugar de eso, esta mujer inquieta y deportista prefiere practicar body surf en Esmelle, montar a caballo por Lobadiz al tiempo que disfruta de unas «vistas impresionantes» o darle a pedal por las pistas de la parroquia. «Conozco rutas espectaculares desde Cabo Prior hasta Doniños pasando por Esmelle y Los Molinos, que es un paraje único para caminar y descubrir la impresionante vegetación que hay aquí», advierte la presentadora.

Además, cuando está en Ferrol, Paloma aprovecha para ir de compras, escaparse al cine -la última que ha visto ha sido Misión Imposible- y rendirse a los placeres del buen yantar. «Me puedes encontrar en la cetárea comiendo mejillones al vapor, buey, nécoras... Esto no tiene precio, no», dice entre risas.

Pero lo que más le tira a Paloma de Ferrol no son los paisajes, ni los paseos, ni el marisco. Lo que le atrae como un imán es su familia. «Los veo a todos y no solo en verano, sino en cualquier época del año y siempre que se presenta una buena ocasión; es por eso que no tenemos tiempo a echarnos de menos. ¡Somos todos muy viajeros!».

Por eso, cuando Paloma hace las maletas para volver a Madrid nunca se despide con un adiós, sino con un hasta luego. «Aquí están mis raíces, desde el primer verano de mi vida y hasta hoy».