Un batallón de diez equipos se encuentran en esa guerra por no caer a Tercera
07 mar 2017 . Actualizado a las 15:39 h.Reconocen en el club que el partido frente al Burgos fue un paso atrás. El análisis también coincide con el que hizo su entrenador, Miguel Ángel Tena, en rueda de prensa. El Racing no sólo se trajo del Plantío un mal resultado, sino que emitió síntomas que parecían olvidados: falta de intensidad y debilidad defensiva. Sin Nano Macedo en el once, la retaguardia se resquebrajó. El coruñés se distingue en el juego aéreo, donde apenas deja un balón sin tocar. Los dos goles del Burgos cayeron del aire. El concurso de Nano se revela trascendente para que el conjunto verde logre la salvación. Una permanencia que cada día parece más cara. Con el paso de las jornadas, lejos de disiparse, la lucha por evitar el descenso se ha compactado. Hasta diez equipos -entre los que figura el Racing- se encuentran en el ajo. Hay un trecho de once puntos desde el Lealtad (36), noveno clasificado y el primero de los que semeja que aún está en problemas -su predecesor en la tabla, el Tudelano (39) ya está a tres partidos del play out-, hasta el Guijuelo (25), segundo por la cola. El Arandina (23) y el Somozas (20), penúltimo y último clasificado, aunque mantienen opciones matemáticas de quedarse un año más en Segunda B, necesitarán una heroicidad para mantenerse a flote.
Tras el traspié del domingo, el Racing dispone ahora de dos opciones inmejorables para ganarse la tranquilidad de aquí a lo que resta de temporada y comenzar, de este modo, centrarse en preparar la siguiente campaña donde desde las oficinas de A Malata ya se ha asegurado que recuperarán el objetivo de ascender a Segunda. La primera oportunidad aparecerá el sábado a la seis de la tarde cuando los futbolistas de Tena se midan en casa al Lealtad. Conseguir la victoria sería un paso crucial para asentarse en una zona más acolchada de la tabla. Y la segunda ocasión para tener un futuro más llevadero, el miércoles de la semana que viene, cuando se dispute el choque frente al Palencia, aplazado en febrero por los daños que el paso de un temporal dejó en la cubierta del estadio.
Si fuese capaz de atrapar esos seis puntos, de volver a encadenar dos victorias consecutivas, el Racing habría dado una zancada de gigante para quedarse en la categoría de bronce otro curso. Pero no será sencillo. Para ello deberá recuperar el tono que exhibió antes del parón de Navidad, cuando encadenó una racha de seis partidos sin conocer la derrota. Aquello le dio un colchón con respecto a la zona de peligro que paulatinamente se ha ido dilapidando. De los últimos seis encuentros, solo ha ganado uno: el derbi frente al Pontevedra, gracias a un solitario tanto de Dani Benítez. Cinco puntos de 18 posibles. Si justo antes de las vacaciones marchaba a ritmo de líder, ahora ha aflojado hasta aproximarse al abismo.
De todos modos, es cierto que en este último tramo le ha tocado enfrentarse a algunos de los mejores conjuntos de la división. Visitó, por ejemplo el Sardinero, y el campo de Barreiros, donde tropezó con un Celta B fulgurante. Y recibió en casa al Pontevedra de Luisito. Son tres de los cuatro equipos que ocupan puestos de ascenso. Y el Burgos, pese a estar abajo, dispone de alguno de los futbolistas más brillantes de Segunda B.