El Servicio Público de Empleo constata la eventualidad del mercado
25 abr 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Más de nueve de cada diez contratos firmados en las tres comarcas durante el pasado mes fueron temporales. De acuerdo con las estadísticas que maneja el Servicio Público de Empleo, en marzo se sellaron en Ferrolterra, Eume y Ortegal un total de 3.474 acuerdos de trabajo, una cifra muy lejana a los 5.000 que se solían firmar antes de que estallase la crisis económica. Los datos confirman la elevada temporalidad que vienen denunciando los representantes sindicales de Ferrolterra, Eume y Ortegal, quienes insisten en que una de las consecuencias del deterioro del mercado de trabajo es la eventualidad de los puestos que se están creando. Incluso van más allá y afirman que una gran mayoría de los pactos laborales que se efectúan actualmente son de media jornada o incluso por pocas horas, contratos de los que abusan especialmente, denuncian, las administraciones públicas.
Las estadísticas del Servicio Público de Empleo reflejan que, 3.195 de los contratos realizados por las empresas de las tres comarcas son temporales, de los que casi el 57 % fueron realizados por hombres y el 43 % restante, por mujeres.
Además, indican que que del volumen total de acuerdos laborales realizados, 310 son cambios de eventuales a indefinidos, pero únicamente representan el 8,8 % de la suma global.
Los servicios, tractores
En el desglose por sectores, las cifras oficiales indican que los servicios continúan siendo el tractor del empleo en la zona, con 2.008 contratos de trabajo realizados. En términos porcentuales representan casi seis de cada diez, constatando el elevado peso que tiene este segmento de actividad en el mercado de trabajo de la comarca.
Le sigue la industria, con 503 acuerdos, la construcción, con 318, y la agricultura, con 99.
Por municipios, el ferrolano es el que concentra el mayor número de pactos laborales, con 1.408, seguido de Narón, con 804, y As Pontes, con 374.
Las estadísticas de empleo vienen a sumarse a la Encuesta de Población Activa (EPA) que se publicó el pasado jueves, y que devolvió a la ciudad ferrolana al vagón de cola de los índices laborales de las grandes ciudades gallegas. Es decir, con las peores tasas de paro, que crecieron en dos puntos porcentuales, y de actividad y ocupación de la comunidad.