El alcalde retrasa quince días más la mesa de negociación con los trabajadores por «motivos de axenda»
29 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.La agenda de los presupuestos se ralentiza. Menos de dos horas después de que el alcalde asegurase ante los medios el pasado lunes que las cuentas estaban pendientes de la próxima mesa de negociación con los representantes de los trabajadores, que se celebraría el 4 de abril, Jorge Suárez trasladaba a sus miembros el aplazamiento de esta cita otros quince días, hasta el 19, después de Semana Santa, por «motivos de axenda». Y con ello, implícitamente se dilata el proceso para presentar unas cuentas municipales que cada vez están más lejos.
Esta semana se consumirá el primer cuarto del ejercicio, y el Ayuntamiento continúa funcionando con las cuentas prorrogadas que elaboró el PP para 2015. Y por el momento, lo único que hay sobre la mesa es un «borrador de un borrador», como definen casi a diario los grupos de la oposición, incompleto y sobre el que ningún partido quiere hacer propuestas hasta no tener el documento completo. Por no haber no hay de momento más que una aproximación, sin negociar, del capítulo I, el destinado a Personal, que supone prácticamente un tercio de los presupuestos municipales.
Todo pese a que en febrero Jorge Suárez incidía en que era «fundamental» aprobar las cuentas en el primer trimestre del año porque de lo contrario «sen uns orzamentos estaríamos tendendo unha alfombra vermella para que unha dereita que todos xulgamos como nefasta no 2011-2015 volvera ao poder en 2019».
Pero los problemas con las cuentas no se limitan solo a las futuras. Ayer estaba previsto que el gobierno local entregase en comisión la liquidación del presupuesto del 2016. Sin embargo, solo se aportó el informe de Intervención, no los datos y tablas íntegros, por lo que ante los reproches de la oposición el punto se retiró del orden del día.
Superávit para amortización
Con la información que se facilitó, el PP arremetió ayer contra la gestión del gobierno local. El concejal popular, Alejandro Langtry, denunció que el resultado del ejercicio es diez millones de euros inferior al del año anterior, con 58 millones frente a los casi 68 de 2015. Y además, alertó de que los siete millones de euros de superávit que recogen no podrán ser destinados a inversión, debido al incumplimiento todo el año de los períodos medios legales de pago a proveedores, por lo que, afirmó, solo se podrá destinar a la amortización de deuda. El capital pendiente de amortizar a 31 de diciembre era de 23,2 millones de euros.