Decenas de coches quedan atrapados de nuevo en el párking del Sánchez Aguilera

FERROL

Llegaron a formarse triples y cuádruples filas y un camión acabó bloqueado

24 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El aparcamiento del Sánchez Aguilera volvió a vivir ayer el caos que periódicamente afecta a los conductores que utilizan esta explanada para dejar sus coches. Antes de las once de la mañana, hora punta en este párking disuasorio, la Policía Local ya había tenido que acudir a la zona después de que decenas de coches se hubiesen quedado atrapados al formarse triples y hasta cuádruples filas. Entre ellos, un camión. Después de una larga espera, los agentes consiguieron localizar a los propietarios de los vehículos que impedían su salida y acudieron a franquear el paso. Pero aún así, muchos otros automóviles quedaban en similar situación. Nada hacía presagiar esta situación cuando a primera hora de la mañana el recinto estaba vacío. Entonces fue cuando una de las afectadas dejó su coche para asistir a la Escuela Oficial de Idiomas.

Al acudir a recogerlo a esa hora se topó que no había por dónde salir. La casualidad quiso que en ese momento llegase la conductora del vehículo que lo obstaculizaba por el frente y se pudo marchar. «Es la primera vez que lo dejo aquí, y cuando llego estaba atrancado por los dos lados, yo no salía», señalaba sin ocultar su indignación. «A primera hora de la mañana no había ni mitad de los coches», explica. Culpa de lo sucedido a que el estacionamiento «no está regulado».

Sin señalizar

La principal bolsa de aparcamiento gratuito que da servicio al centro de la ciudad es únicamente un terreno de arena y grava sin marcas que delimiten las plazas de estacionamiento. Y este factor no solo permite que sucedan bloqueos como el de ayer, sino que además ata de pies y manos la acción de la policía: no pueden multar ni enviar a la grúa para retirar coches porque estrictamente hablando y al no haber marcas en el suelo tan legal, o ilegal según se mire, es el coche que bloquea como el que queda atrapado. Y todo queda en una cuestión de civismo.

El alcalde, Jorge Suárez, señaló ser consciente de la situación, pero esgrime que el Concello no puede proceder a la señalización y delimitación de las plazas sin autorización de Defensa, la propietaria de unos terrenos incluidos en el convenio aún pendiente de ejecución. Y con el Gobierno en funciones «é complicado» obtener el permiso para hacerlo. No obstante, y con la peatonalización a la vuelta de la esquina, «hai que meterlle man a ese aparcamento», por lo que Suárez dice que es una tarea que se acometerá el próximo año.