El jugador asegura que el equipo disfrutó con su juego en Cádiz pero ve complicado el partido de vuelta
25 may 2016 . Actualizado a las 08:41 h.Diego Peláez y Joselu no solo se tienden bien en el campo, sino que además son amigos. En el Compostela formaron una pareja imparable, Peláez daba los pases y Joselu finalizaba. Juáncar, el secretario técnico del Racing, pensó que esta magnífica alianza se podría repetir en el club ferrolano y así llegó Peláez, una temporada después que Joselu. Sin embargo, el resultado no fue el mismo, aunque hay que tener en cuenta que jugar en el Racing o en el Compostela es muy diferente, algo que los dos jugadores admiten. En el club santiagués y a la contra, Joselu encontraba muchos metros por delante para imponer su carrera y finalización. En el Racing los equipos suelen jugar a defender, nunca hay metros por delante y para llegar a una buena posición de disparo hay que superar a dos o tres defensas. Tampoco Peláez encuentra fácilmente una buena posición para disparar, de ahí que parezca que marea mucho la pelota.
Frente al Cádiz, Peláez jugó en punta, aunque no pudo hacerlo con Joselu, que vio el partido desde la grada por estar sancionado: «En el Ramón de Carranza yo jugué en mi posición habitual, quien actuó en punta fue Héber. La verdad es que eche de menos a Joselu -asegura Peláez- aunque hay que reconocer que Héber lo hizo muy bien, teniendo en cuenta que no era su posición habitual».
A Peláez no le disgustó el partido jugado por el Racing en Cádiz: «Tuvimos la pelota y disfrutamos. Es más, yo creo que hasta nos sobró un poco de posesión, aunque lo cierto es que nos faltó Joselu, nuestra referencia arriba, y es verdad que fue algo que no nos incitó a atacar, a meter ese pases en profundidad. Cuando levantabas la cabeza y mirabas, lo único que veías eran camisetas amarillas».
Admite que no encajar goles es bueno pero también sabe que no se marcó y que un gol del Cádiz en A Malata pondría las cosas muy complicadas: «Sabíamos que marcar goles, sería muy difícil -indica- nos enfrentábamos a un rival que multiplica por cuatro o cinco veces nuestro presupuesto. Nos apretó, incluso yo pensé que nos iba a apretar más, aunque yo me fui satisfecho de Cádiz, todos peleamos, corrimos y trabajamos».
Un resultado peligroso
La eliminatoria la ve al cincuenta por ciento: «Sigue muy igualada, quizá a cincuenta por ciento, aunque ahora mismo está muy favorable para ellos, ya que si marcan en A Malata, nos lo pondrán más difícil. Nosotros en el partido de vuelta tenemos que ganar y lo haremos con nuestro fútbol».