Con esta medida el Concello espera dar respuesta a las mil personas que están en lista de espera para ver la fortaleza
01 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Las vacaciones de verano tocan a su fin para la mayoría, pero el interés por el nuevo programa de visitas al castillo de La Palma no decae. Tanto es así que más de mil personas continúan en lista de espera para poder conocer por dentro la antigua fortaleza y, ante esta situación, el Concello ha decidido ampliar al mes de septiembre el programa de visitas, que en principio solo se iba a desarrollar durante el mes de agosto.
Así lo anunció ayer la concejala de Cultura, Begoña Roldós (PP), quien explicó que la ampliación del servicio ha sido posible gracias a la autorización de los propietarios del castillo -la cadena DGH (Diana Grandes Hoteles), el grupo gallego Invertaresa y Maxi Logistic-, que no pusieron reparos a la petición que le hizo el Ayuntamiento para prolongar las visitas durante un mes más. En septiembre, el horario para acceder a la fortaleza que funcionó primero como fortín defensivo y más tarde como prisión militar será el mismo que ya funcionó en agosto: los viernes, sábados y domingos, con cinco pases cada día (a las 10.00, 11.30, 13.00, 17.30 y 19.00 horas).
¿Cabría la posibilidad de ampliar todavía más el programa de visitas ante la elevada demanda que ha suscitado? En este punto, Begoña Roldós se muestra tajante: «En ningún momento nos hemos planteado la posibilidad de seguir con las visitas de forma indefinida, porque, por un lado, el Concello no es el propietario, y por otro, eso supondría un gasto que ahora no podemos asumir».
La Palma se encuentra desde hace ya más de diez años en manos de una sociedad inversora que lo adquirió con el objetivo de transformarlo en un hotel de lujo con spa. Sin embargo, en todo este tiempo el proyecto no ha logrado materializarse; en una primera etapa se estancó debido a problemas de tipo legal y burocrático, y más tarde, una vez superados estos escollos, se topó con dificultades para hallar financiación.
A principios de este verano, los propietarios del castillo comunicaron al alcalde que a lo largo de este mes de septiembre le informarían sobre sus planes para La Palma. Tienen dos opciones: o bien seguir con el proyecto hotelero o bien abandonarlo y poner a la venta la fortaleza.