Abraham Mateo: «Las abrahamers están muy crazies»

raquel freire FERROL / LA VOZ

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CÉSAR TOIMIL

Parque Ferrol y Carrefour contaron ayer con la presencia de Abraham Mateo (Cádiz, 1998), para la firma de su último disco

12 dic 2014 . Actualizado a las 08:51 h.

Parque Ferrol y Carrefour contaron ayer con la presencia de Abraham Mateo (Cádiz, 1998), para la firma de su último disco Who I AM y de su recién publicada biografía I. AM, en una tarde en la que desató la locura de sus fans.

-Con solo siete años consiguió una mención especial en el festival musical Veo Veo de la fundación Teresa Rabal, ¿qué recuerda de aquella experiencia?

-La verdad es que guardo un buen recuerdo de ese momento. Fue la primera vez que me subí a un escenario, vino toda mi familia a verme y además me llevé el premio. Lo recuerdo con mucho cariño.

-Además de ser cantante, también ha participado como actor en varias series de televisión, ¿con qué faceta se siente más cómodo?

-Cantando es con lo que más cómodo me siento, ya que es algo que llevo haciendo desde que era pequeño. Sin embargo, el mundo de la interpretación también me llama mucho y no descarto que pueda ser mi profesión en el futuro.

-Su single Señorita consiguió 33 millones de visitas en youtube, convirtiéndose en el vídeo musical más visto en España en 2013, ¿alguna vez pensó que lograría ese éxito?

- Para nada lo pensé, colgamos el vídeo y en seguida comenzaron a subir las visitas. Hoy en día tiene más de 60 millones de visualizaciones, lo que es una auténtica locura. Todo ha sido super rápido, nunca llegué a imaginar todo lo que me está pasando.

-¿Qué opina de que se le identifique como «el Justin Bieber español»?

-La verdad es que no tenemos nada que ver, somos personas diferentes, con estilos diferentes.

-En la actualidad, cuenta con miles de seguidoras, ¿cuál es la situación más surrealista que ha vivido con una fan?

- Tengo muchísimas anécdotas, las abrahamers están muy crazies y eso es una de las cosas que más me gusta de ellas. La última que recuerdo fue tras la grabación de un programa de televisión en Canarias. A la salida, había muchísima gente y una fan vino con un perro pelado y me pidió que se lo firmara. Aluciné.