Piden tres años de cárcel por una muerte en accidente de tráfico

Noelia Silvosa
noelia silvosa FERROL / LA VOZ

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Perdió el control del coche en Valdoviño y falleció uno de sus acompañantes

22 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Un hombre acusado de homicidio imprudente a consecuencia de un accidente de tráfico en el que conducía bajo los efectos de bebidas alcohólicas se enfrenta a una pena de tres años de prisión. Eso es lo que pide el fiscal, una solicitud que mantuvo tras la vista oral que tuvo lugar ayer en el Juzgado de lo Penal número 1, y en la que además mantuvo la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por un tiempo de cinco años con pérdida de vigencia del permiso o licencia que de conducción.

El lamentable siniestro que terminó con la vida de uno de los ocupantes del vehículo tuvo lugar el 1 de mayo del 2010, cuando el acusado (E.R.A.C.), natural de Perú, conducía su Nissan por la carretera AC-566 en compañía de otras dos personas y tras haber consumido bebidas alcohólicas. Al llegar al punto kilométrico 4.500, en el término municipal de Valdoviño, el conductor perdió el control del vehículo dando lugar a una salida de vía por el margen izquierdo.

Vuelco del coche

Como consecuencia, colisionó contra el talud y el turismo dio un vuelco. El acompañante que viajaba en el asiento trasero derecho falleció en el mismo lugar del siniestro, a raíz de un traumatismo craneoencefálico con lesión de centros vitales y parada cardiorrespiratoria. Por su parte el copiloto resultó también lesionado como resultado del accidente, aunque en el escrito del fiscal no constan las lesiones sufridas y esta persona renunció a acciones civiles y penales. Así mismo, el padre del fallecido y su conviviente también han renunciado a ellas.

No obstante, el Ministerio Fiscal pedía que el acusado indemnizase directa y solidariamente con la compañía aseguradora al hijo menor en la cantidad de 65.018 euros por el fallecimiento de su padre. Finalmente se retiró dicha responsabilidad civil, dado que ya se había sufragado con anterioridad.

Síntomas de embriaguez

El día en que se produjo el fatal siniestro, el acusado fue sometido a la prueba de alcoholemia ante los evidentes síntomas que presentaba. Ojos brillantes, habla titubeante, fuerte olor de cerca y notorio a distancia o movimientos oscilantes son algunas de las evidencias descritas por los agentes que acudieron al lugar del accidente. La prueba de detección de impregnación alcohólica arrojó un resultado de 0,61 miligramos por aire espirado en la primera prueba y de 0,60 en la segunda. El caso quedó visto para sentencia.