Si bien proliferan los procesos catarrales, el pico gripal aún está por llegar
31 oct 2014 . Actualizado a las 10:54 h.Esa mezcla entre verano y otoño que el consenso popular ya ha acuñado como vertoño, no se está manifestando en Urgencias. El servicio del Arquitecto Marcide se encuentra totalmente normalizado, continuando con la tónica de las últimas semanas. El motivo de la calma en el área -que en la mañana de ayer no tenía pendiente ni un solo ingreso- responde a muchos factores y a la vez a ninguno en concreto.
Los picos del servicio responden a una acumulación de pacientes con cuadros diversos, y en la mayor parte de las ocasiones son impredecibles. No es así en el caso de los picos gripales, que dan paso cada año a la saturación del área. No obstante, la onda epidemiológica todavía está por venir.
Mucho catarro, poca gripe
El famoso vertoño está dejando un reguero de catarros a su paso. Los resfriados han llegado con fuerza y, al mismo tiempo, las alergias se niegan a abandonar. Pero estas son patologías que, si bien presentan síntomas de lo más molestos, no suelen llegar a Urgencias y frecuentemente se quedan en el umbral de la Atención Primaria. Sin embargo, la gripe es otra cosa. Su punto álgido se espera para finales de enero y principios de febrero, puesto que es ahí donde el virus ataca con mayor intensidad conviviendo en muchos casos con patologías de base del paciente que ve empeorado su cuadro y tiene muchas más papeletas de acabar en Urgencias.
Un único pico en verano
Lo cierto es que el servicio lleva un tiempo sin grandes esperas. El único pico del verano tuvo lugar durante los primeros días de septiembre, con una afluencia que, no obstante, no llegó a los niveles de las saturaciones invernales. El servicio vivió sus momentos más críticos durante el estío, con jornadas en las que hubo más de veinte personas en espera para ser ingresadas.