Los rincones más literarios de Ferrol

FERROL

RAMON LOUREIRO

27 jul 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Si de lo que se trata es de redescubrir Ferrol -o por decirlo con menos vueltas, de mirar la ciudad con ojos nuevos y de seguir aprovechando el verano para visitar los tesoros que uno tiene más cerca-, no es mala guía la literatura. Porque Ferrol ha sido siempre una ciudad muy literaria. Y lo literario sigue estando muy presente en ella.

Podríamos comenzar nuestro paseo, si a ustedes les parece, por los Jardines de Herrera. El paisaje que desde allí se contempla era, para Gonzalo Torrente Ballester, el más hermoso del mundo, puesto que abarcaba y abarca, al mismo tiempo -parece evidente que a don Gonzalo le agradaba mucho eso, no solo la tierra y el mar y el cielo, sino también los barcos y los astilleros, que desde hace siglos son en Ferrol la vida de mucha gente.

Los Jardines de Herrera guardan la memoria de Torrente. Pero también la de otros grandes escritores, como Pepe Hierro, a quien siempre el gustaba mucho asomarse a ver desde allí la ría cuando venía a Ferrol para formar parte del jurado del Premio Esquío de Poesía. Un premio que se fallaba allí al lado, en el Parador de Turismo, y que hizo de Ferrol, durante años, una referencia permanente en el ámbito de las letras españolas. Podríamos visitar después, si les parece, la Sala de Conversas del Casino Ferrolano, decorada con las pinturas de Bello Piñeiro. Por allí pasaron muchos de los más grandes escritores gallegos. Desde Wenceslao Fernández Flórez hasta don Ramón Otero Pedrayo, pasando naturalmente por Álvaro Cunqueiro. Y todos ellos acompañados por José María López Ramón, generalmente. ¿Y qué les parece si después nos acercamos a la plaza que lleva el nombre de Carlos Casares, junto a la Casa do Patín, en Esteiro?