La mejora del área natural consiste en la instalación de una cierre de madera en el margen izquierdo del caudal del río
26 jul 2014 . Actualizado a las 06:00 h.El Concello de Neda reforzará la seguridad en el entorno de la piscina natural de la zona de A Cobeluda con la construcción de un cierre de madera. Las obras se iniciarán de forma inminente, según explicó el alcalde, Ignacio Cabezón, y de esta forma aumentarán los dispositivos de seguridad en el entorno.
Las obras consistirán en la instalación de una barandilla de madera en el lateral izquierdo del cauce fluvial. De esta forma, se finalizan las labores de mejora del área fluvial que se iniciaron el año pasado con la instalación de un cierre similar en el margen derecho. El presupuesto establecido para la realización de esta última obra, cuyo comienzo prevén la semana que viene, es de seis mil euros. En total, ambas infraestructuras han contado con una inversión de más de diez mil euros que no han tenido repercusiones en las arcas locales ya que han sido financiadas de forma íntegra por la Xunta de Galicia.
El cierre de la presa del río Castro es lo que permite habilitar todos los años esta zona de baño para que los vecinos de la parroquia puedan disponer de un área cercana en la que refrescarse y relajarse rodeados de naturaleza. Además, el cese temporal de la presa mejora otros aspectos de seguridad al permitir el almacenamiento de agua en caso de que sea necesario su uso para la extinción de incendios.
Tareas de acondicionamiento
Por otro lado, la Diputación de A Coruña ha proporcionado al Concello de Neda una subvención de más de ocho mil euros para apoyar el programa local de cuadrillas de obras y servicios mínimos. Esta cantidad se destinará a la contratación de un oficial de segunda y dos peones que realizarán distintas tareas de acondicionamiento, tanto en la zona rural como en los edificios de titularidad municipal.
Para el proceso de selección de candidatos, que comenzará a partir de la segunda quincena de agosto, se solicitarán los perfiles profesionales de las personas en paro a las oficinas del INEM. Aquellos que finalmente resulten seleccionados, prestarán sus servicios al organismo local por un período de tres meses. Durante este tiempo, trabajarán un total de veinticinco horas a la semana en las que llevarán a cabo distintas labores como desbroce de cunetas, pequeñas reparaciones eléctricas o mejoras en la accesibilidad de las viviendas.