El hijo de los propietarios se pone al frente del establecimiento
20 ene 2014 . Actualizado a las 13:51 h.El hotel que la cadena Hesperia gestionó hasta el pasado otoño ha iniciado una nueva etapa bajo la denominación de Gran Hotel de Ferrol, y dirigido por Miguel Vílchez. Continúa contando con la categoría de cuatro estrellas y con la misma plantilla, un total de 15 empleados, que contaba hasta el momento.
Los propietarios del establecimiento, la sociedad Enrique I, habían llegado a un acuerdo en el 2003 con Hesperia -luego NH- para gestionarlo, pero ese pacto culminó en septiembre y desde el pasado día 1, Miguel Vílchez (Ferrol, 1985), hijo de los propietarios y especialista en el sector, se ha puesto al frente para darle nuevos bríos.
Hasta entonces, el nuevo director se encontraba trabajando en un hotel de gran lujo de la cadena Meliá en Tanzania, como segundo jefe de administración, pero asegura que afronta esperanzado y consciente del gran potencial turístico que tiene la comarca, esta nueva andadura. «Para mí es un reto; dejé mi trabajo y mi posición, pero llevaba mucho tiempo fuera y tenía ganas de volver a Ferrol», afirma.
Lo hace en un momento en el que la caída del cliente de empresa -Navantia es el motor de este tipo de mercado y su crisis está haciendo mella en el sector- está siendo significativa, por lo que, sin olvidar este segmento, pretende potenciar la demanda de ocupación turística. «Hay sitios en el mundo que con mucho menos de lo que tenemos aquí lo explotan muchísimo más», afirma.
La estrategia en la que se va a basar la nueva etapa del hotel se fundamenta en una mejora del servicio, en la reducción de costes y en el incremento de los ingresos. En estos tres meses que han discurrido desde que asumió la gestión del hotel, explica que ya se han introducido alguna mejora, como el incremento de la línea wifi o la ampliación de la cocina en horarios o jornadas en las que no se estaba prestando este servicio.
«Aún estoy poniendo los pies en la tierra», explica Vílchez, aunque se confiesa satisfecho del arranque. «En octubre y noviembre tuvimos unas cifras muy buenas en cuanto al alojamiento, que bajaron en diciembre, aunque se compensó con las comidas y cenas de Navidad. «Por primera vez hicimos la cena de Fin de Año, en la que tuvimos a 150 invitados», afirma Miguel Vílchez.
A medio plazo, los propietarios del Gran Hotel de Ferrol, que cuenta con 95 habitaciones, de las cuales 4 son junior suite y una suite, se plantean llevar a cabo también remodelaciones en las instalaciones, aunque las inversiones se realizarán una vez que se haya asentado el establecimiento en esta nueva andadura. «Ahora las inversiones son difíciles de realizar, así que iremos poco a poco», afirma su máximo responsable.
El negocio hotelero conserva la categoría que tenía de cuatro estrellas