Navantia traslada a su consejo su grave situación financiera

Beatriz García Couce
beatriz couce FERROL / LA VOZ

FERROL

El «Adelaide» -en foto de archivo- es el único barco en construcción en el astillero ferrolano.
El «Adelaide» -en foto de archivo- es el único barco en construcción en el astillero ferrolano. josé pardo< / span>

Sin nuevos contratos, la compañía lleva un lustro en pérdidas

01 feb 2013 . Actualizado a las 12:45 h.

Sumida en una grave crisis de ocupación, debido a que en los últimos cinco años no logra nuevos encargos para la fabricación de buques, y con unos números rojos de los que no logra desembarazarse también desde hace un lustro, Navantia ha advertido a su consejo de administración de su grave situación financiera.

Las acciones comerciales en las que la empresa pública cuenta con expectativas, como es el caso de la adjudicación de un encargo para el diseño, la transferencia de tecnología y la asistencia técnica para un megabuque similar al Juan Carlos I para Turquía, siguen sin concretarse. Paralelamente, la carga de trabajo se va agotando, abocando, en el caso concreto de Ferrol, a la subactividad a las factorías en el entorno del verano.

A falta de ratificar estos datos por parte de Navantia, las últimas previsiones apuntaban a que los astilleros públicos cerrarían el 2012 con unos 40 millones de euros de pérdidas.

Encuentro

El comité intercentros ha solicitado reiteradamente un encuentro con los responsables financieros de la empresa, para conocer el alcance real de la crisis económica, pero por el momento no han sido citados a esa entrevista. El presidente de la empresa, José Manuel Revuelta, se comprometió hace escasas semanas con los representantes de la plantilla del astillero ferrolano a facilitar ese encuentro, aunque lo acontecido en la reunión de la comisión de seguimiento de los estudios técnicos, económicos y jurídicos del dique flotante han enrarecido las relaciones con la parte social.

En Ferrol, tras la negativa de la compañía al dique flotante y sin nuevos encargos que palíen el agotamiento de la carga de trabajo del único buque en construcción, el Adelaide, varios partidos políticos han manifestado sus sospechas de que el Gobierno pueda preparar un ajuste para el sector.