La falta de socorristas merma la vigilancia en la playa de Ber

F.?F.

FERROL

09 ago 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

ferrol | «Cando fai bo tempo van, e cando non, pois non van». Así se las apañan los dos únicos socorristas que ha podido contratar esta temporada el Concello de Pontedeume para vigilar la playa de Ber, la más populosa del verano eumés. Esa frase fue pronunciada ayer por un responsable de la agrupación de Protección Civil en el municipio, que coordina las tareas de salvamento y rescate en los arenales. Resulta que sólo hay dos socorristas porque fue casi imposible contratar a más personal. La temporada de playas ya comenzó mal, pues dos de los profesionales ya incorporados al servicio presentaron su renuncia. El Concello eumés empezó ahí un proceso selectivo para reforzar la plantilla y sustituir a los dos especialistas en salvamento.

Las mismas fuentes de Protección Civil explicaron que se llegaron a realizar dos turnos de selección con personal enviado desde el Servicio Galego de Colocación. Llegaron a Pontedeume para dejarse hacer la entrevista de trabajo, pero ninguno quiso aceptar el puesto.

Los portavoces de la agrupación de voluntarios no se explican por qué tuvo tan poco éxito el proceso de selección, ya que el sueldo, dicen, no es peor que en otros concellos.

Sea como fuere, lo cierto es que el Concello tuvo que contentarse con cubrir el servicio de socorristas en Ber con dos personas. Están contratadas para realizar una jornada laboral de 37 horas y media durante cinco días a la semana. Obviamente, con dos socorristas resulta imposible cubrir todos los turnos y esto provoca que el puesto de salvamento de la playa eumesa esté vacío en muchas ocasiones. «Fan o que poden», subrayan desde Protección Civil. Los dos socorristas, naturales de Pontedeume, van a la playa cuando hace buen tiempo y la afluencia de bañistas es más importante. Empiezan la jornada sobre las once de la mañana y la acaban también en función de si quedan muchos usuarios en el arenal. Si hay pocos bañistas se van antes y si abundan, esperan un poco más.

Desde Protección Civil explicaron que Ber no es una playa que dé sustos. Situada en el interior de la ría de Ares, los problemas más habituales entre los bañistas son las picaduras de escarapotes.