Pastor cierra la puerta del Congreso a que Puigdemont exponga su plan sin votación

maría eugenia alonso MADRID / COLPISA

ESPAÑA

JuanJo Martín | EFE

Le recuerda que puede intervenir en la comisión de comunidades autónomas del Senado

01 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Ana Pastor enterró las pretensiones de Carles Puigdemont de intervenir en el Congreso en un debate sin votación. La presidenta de la Cámara baja rechazó la petición del líder de la Generalitat de exponer a los diputados su plan de convocar un referendo en Cataluña el 1 de octubre y debatirlo sin que hubiera una votación. «La carta que nos ha dirigido no contiene la respuesta que esperábamos», reconoció poco después Puigdemont.

Pastor no se demoró en su réplica y apenas dos días después de haber recibido la misiva del presidente autonómico le contestó que el formato que propone no tiene cabida en el reglamento del Cámara baja. La presidenta armó su carta con las razones de los servicios jurídicos y arguyó que, según el artículo 87 de la Constitución y el artículo 127 del reglamento del Congreso, su comparecencia solo podría acogerse si presenta una proposición de ley aprobada en el Parlamento catalán, una reforma constitucional o del Estatuto de autonomía y esta debería ser debatida y, posteriormente, votada. «Fuera de este procedimiento, el reglamento no contempla ningún debate en sesión plenaria en el que pudiera solicitar comparecer», apuntó Pastor. 

Falta de interés

Ese trámite se ha utilizado en las reformas de estatutos, en la discusión de proposiciones de ley procedentes de Parlamentos autonómicos o con el plan Ibarretxe, que se presentó como una reforma estatutaria y que también fue debatido y rechazado en el Congreso, en febrero del 2005. Un precedente que el Ejecutivo catalán no se plantea repetir.

No obstante, Pastor recordó a Puigdemont que el reglamento del Senado sí prevé este tipo de comparecencias en la Comisión General de Comunidades Autónomas, a la que pueden acudir los presidentes autonómicos. Una oferta que Puigdemont ya declinó en marzo esgrimiendo que pidió impartir una conferencia no participar en una comisión. «Es muy decepcionante. El Senado ha perdido una gran oportunidad de escuchar lo que tenemos que decir», dijo entonces.

El presidente de la Generalitat lamentó ayer la negativa de Pastor a su petición porque a su juicio «no hay nada explícito en el reglamento del Congreso que lo prohíba» sino «falta de interés». «Un acuerdo de la Mesa sería suficiente para habilitar cualquier fórmula», afirmó, y recordó que su solicitud respondía «a la petición que le había hecho el propio Mariano Rajoy». Además rechazó la propuesta de Pastor de presentar una proposición de ley, porque «Cataluña ya ha presentado muchas propuestas y todas han sido rechazadas». «Ya no nos queda nada más que ir a explicarnos», pero «parece que no nos quieren escuchar», remachó.

Fuentes del Congreso confirmaron que Pastor lo llamó también por teléfono para explicarle que la carta responde exclusivamente a su petición de hablar para «todos los diputados», es decir, en el pleno. Sin embargo, el reglamento no impediría citar al líder de la Generalitat en una comisión, la Constitucional, como sugirió en su día el PDECat.

Desde el entorno de Puigdemont se tomaron la respuesta como un portazo a sus reclamaciones «democráticas» y dieron por cerrada esta vía.

El Ayuntamiento de Barcelona rechaza una moción del PP en contra del referendo

El pleno del Ayuntamiento de Barcelona rechazó ayer una propuesta del PP contraria al apoyo municipal al referendo de independencia de Cataluña, lo que provocó que los concejales del PSC se desmarcasen de los de Barcelona En Comú de la alcaldesa Ada Colau. En votación nominal, los 11 concejales de BComú, incluida la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, votaron contra la propuesta del PP de «manifestar el compromiso del Ayuntamiento de Barcelona de no apoyar ni proporcionar medios ni personal municipal el día 1 de octubre, en relación al referendo que se pretende celebrar». También rechazaron la propuesta popular los 17 concejales que sumaban ayer los del PDECat, ERC, CUP y el de Demòcrates de Catalunya, Gerard Ardanuy.

Los cuatro concejales del PSC, que forman parte del gobierno municipal, apoyaron la propuesta del PP, que contó con el apoyo de los tres concejales populares y de otros cuatro ediles de Ciudadanos, ya que el concejal Francisco Sierra no estaba en ese momento en el pleno.

El primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, como portavoz de BComú, argumentó que avalar la propuesta del PP «sería una criminalización preventiva», ya que ni el Gobierno de la Generalitat explicó los aspectos básicos de la convocatoria, ni el Ejecutivo del PP como piensa actuar. Por contra, el segundo teniente de alcalde, el socialista Jaume Collboni, explicó el apoyo a la propuesta del PP en el rechazo a la «vía unilateral» que ha tomado desde hace cinco años el Ejecutivo de la Generalitat y en la falta de garantías legales de la convocatoria del 1-O.

La división del gobierno municipal por la cuestión soberanista llevó a la CUP a pedir a la alcaldesa a expulse del gobierno municipal al PSC.

PP, Ciudadanos y PSC no acudirán a la presentación de la ley de la consulta

Ciudadanos, PSC y PP no asistirán al acto conjunto convocado por Junts pel Sí y la CUP el martes en el Parlamento catalán para dar a conocer la ley del referendo, mientras que SíQueEsPot aún no ha tomado una decisión.

El compromiso de dar a conocer el 4 de julio los detalles organizativos de la pretendida consulta se desdoblará en dos partes, con la finalidad de que la parte legislativa sea explicada en la sede del Parlamento catalán y, horas más tarde, en un acto público en el Teatre Nacional de Catalunya se expondrán los detalles operativos.