El referendo independentista llega hoy al Congreso

n. v. MADRID / COLPISA

ESPAÑA

Toni Albir | efe

La iniciativa permitirá constatar la mayoría parlamentaria que, encabezada por PP, PSOE y Ciudadanos, rechaza el plan «ilegal» del Ejecutivo autonómico

21 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

No hará falta que Carles Puigdemont acuda a las Cortes Generales para que su propuesta de referendo se someta a examen en el Congreso. La Cámara baja votará hoy una moción en la que el PDECat insta al Gobierno a «respetar» la hoja de ruta de la Generalitat y, por lo tanto, la convocatoria de una consulta independentista el 1 de octubre. Aun abocada al fracaso, la iniciativa permitirá constatar la mayoría parlamentaria que, encabezada por PP, PSOE y Ciudadanos, rechaza el plan «ilegal» del Ejecutivo autonómico. «Tampoco es la primera vez que ocurre», relativizan fuentes de la formación nacionalista. El 8 de abril del 2014, el Parlamento catalán ya llevó al Congreso una proposición de ley para celebrar una consulta sobre el futuro de Cataluña. 299 diputados del PP, PSOE, UPyD, Foro Asturias y UPN no lo aceptaron. 

Ahora la moción de la antigua Convergència va camino de obtener el mismo resultado. En realidad, el texto fue modificado ayer. El original, que reclamaba al Ejecutivo de Mariano Rajoy negociar la fecha y la pregunta de la consulta, caducó el día que Puigdemont fijó en el 1 de octubre la cita. Los populares dan por sentado que contarán con el respaldo del PSOE. En lo inmediato, deberán estudiar la carta en la que Puigdemont acepta comparecer en el Congreso para explicar las razones por las que promueve la consulta. El Gobierno sostiene que ese debate debería concluir con una votación que refleje si los representantes de la «soberanía nacional» dan o no su aval al planteamiento soberanista. Un escenario que trata de evitar el presidente catalán. Este no quiere llevar al Congreso una reforma constitucional ni mandato alguno del Parlamento autonómico que permita a los diputados pronunciarse. Fuentes del PDECat plantean como alternativa que Puigdemont acuda a la Comisión Constitucional, un marco para intercambiar impresiones con los grupos.