Alfonso Dastis: «El Gobierno tiene instrumentos de sobra para impedir el referendo en Cataluña»

Fue una de las grandes sorpresas en la última alineación ministerial de Mariano Rajoy, pero quienes le conocen y sufren Bruselas lo entendieron a la perfección. Después de tres décadas de trabajo en la carrera diplomática, Alfonso Dastis (Jerez de la Frontera, 1955) fue embajador representante permanente ante la Unión Europea desde finales del 2011 hasta noviembre del 2016. La UE da y quita, pero curte, y al igual que sucedió con su nombramiento como ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, en Bruselas todo tiene un porqué.

-España fue el gran problema y, ahora, a golpe de PIB, se ha convertido en el alumno ejemplar. Proclaman que España ha vuelto, ¿pero en qué se traduce eso?

-Vamos paso a paso. Que España ha vuelto es algo que reconocen las propias instituciones europeas, que nos piden que tiremos del carro. España acepta ese reto. Estamos en la vanguardia de las propuestas para la defensa europea o para el avance en una mayor integración.

-Si en lo económico las aguas han vuelto a su cauce, en lo político, los problemas llegarán con el referendo catalán. ¿Se celebrará?

-La respuesta es simple: no.

-¿Y como lo impedirán?

-El Gobierno tiene instrumentos de sobra para impedirlo, pero confiemos en que se impongan la cordura y el sentido común.

-¿Le preguntan sus colegas mucho por Cataluña?

-El otro día tomaba un café en una charla con algunos de sus compañeros de prensa internacional. El único que me preguntó fue un español. Esa anécdota refleja lo que se vive fuera de nuestras fronteras.

-¿Qué futuro tendría una Cataluña independiente dentro de la UE?

-Nadie contempla esa hipótesis.

-¿España aceptaría la inclusión en la UE de una Escocia independizada de Gran Bretaña respetando los cauces constitucionales?

-España ha reiterado decenas de veces su opinión, que coincide con la expresada por la propia Comisión y es unánime en la Unión: si un territorio se independiza, se convierte en un tercer país y queda por tanto fuera de la UE. Escocia tendría que ponerse a la cola e iniciar el proceso de adhesión.

-Hablando del brexit, las negociaciones no han comenzado de la mejor manera. ¿Se teme lo peor?

-Si se refiere a un no acuerdo, contemplamos todas las posibilidades, pero trabajamos para su consecución. No conseguirlo supondría, sobre todo, un duro varapalo para la economía británica.

-¿Si tuviese un hijo trabajando en Londres estaría preocupado?

-A todos los que tienen hijos en el Reino Unido les puedo decir que estén tranquilos, porque el Gobierno trabaja para que se mantengan los derechos de todos los españoles que se ganan la vida en territorio británico.

-¿España es favorable a un brexit blando o a uno duro?

-España es partidaria de mantener una situación lo más parecida a la actual. Será el Reino Unido el que defina qué brexit quiere cuando empecemos a negociar. Nosotros hemos fijado ya nuestras líneas rojas.

-¿Lograr capacidad de veto sobre el futuro de Gibraltar ha sido hasta ahora su mayor victoria?

-Decía Napoleón que las victorias tienen cien padres y las derrotas son huérfanas. Digamos que estamos satisfechos de que los otros 26 Estados miembros hayan entendido y respaldado que Gibraltar es un asunto bilateral que tienen que resolver España y el Reino Unido.

-La Europa a 27 está mostrando una imagen de unidad realmente sorprendente

-Es un reflejo de lo que venimos diciendo, que el brexit nos unirá más.

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