Los susanistas consideran al exlíder cómplice de los insultos a la candidata

E. C. MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

Zipi | EFE

El ex secretario general no desautoriza los ataques del alcalde de Calasparra y crece la tensión entre ambos bandos

09 may 2017 . Actualizado a las 07:51 h.

La tensión, el intercambio de descalificaciones y el enfrentamiento entre los equipos de Susana Díaz y Pedro Sánchez suben desde que terminó la recogida de avales y a medida que se acerca la cita del 21 de mayo. Ambos piden públicamente prudencia, pero sus partidarios se emplean a fondo en las refriegas en su nombre. El último incendio, por el momento, se produjo a raíz de unas manifestaciones del alcalde de Calasparra, José Vélez, que en un acto de campaña del ex secretario general celebrado el pasado domingo acusó a la gestora que preside Javier Fernández de utilizar «prácticas mafiosas» y de adueñarse de Ferraz para apoyar la candidatura de la presidenta andaluza, a la que llamó La Faraona y acusó de «ponerse de rodillas» ante Rajoy, en referencia a la abstención en la investidura que le permitió seguir en la Moncloa.

Dimisión

Los partidarios de Díaz se movilizaron en la redes sociales exigiendo la dimisión de Vélez y la intervención de Sánchez para desautorizarlo. Ante la negativa de este, los susanistas lo acusaron ayer de ser cómplice de los ataques frontales de su telonero a su principal adversaria y a la dirección interina. La secretaria de organización del PSOE de Aragón, Pilar Alegría, dijo que lo más grave no son las difamaciones de Vélez, sino el «silencio cómplice» de Sánchez, que «ante tantas barbaridades e insultos no las ha desautorizado». Y añadió que le preocupaba que esa manera de hacer campaña pueda ser «la antesala de la forma de dirigir el partido» si gana las primarias. Alegría aludía también al secretario provincial del PSOE de Valencia, José Luis Ábalos, quien en un acto en Elche insinuó que la destitución de Sánchez para «colocar» a Susana Díaz respondía al mandato de Rajoy.

Para contrarrestar estas críticas, los sanchistas recordaron que los que ahora cargan contra Vélez y Abalos no dijeron nada cuando se conoció por una grabación que el número dos del PSOE en el Congreso, el destacado susanista Miguel Ángel Heredia, había insultado a Margarita Robles y sostenido ante un grupo de jóvenes que Ignacio Fernández Toxo le había avisado de un pacto secreto del ex secretario general con los independentistas, lo que tuvo que rectificar cuando el propio secretario general de CC .OO. lo negó. «Todos debemos bajar el diapasón, yo el primero», señaló el coordinador de estrategia de la campaña de Sánchez, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, quien se quejó también de que Eduardo Madina los haya «comparado con Le Pen».

Cosas reales

Robles calificó de «excesiva» la expresión usada por Vélez, pero añadió que dijo «cosas objetivamente reales», como la referencia a la abstención a Rajoy «impuesta por la gestora». Por su parte, la presidenta del PSOE andaluz. Micaela Navarro, manifestó que no estaría «de más» que Sánchez desautorizara a Vélez.