El Gobierno catalán acentúa su desafío y encarga las papeletas para celebrar el referendo

cristian reino BARCELONA / COLPISA

ESPAÑA

ANDREU DALMAU | Efe

El líder de ERC, Oriol Junqueras, advierte al Ejecutivo de que las condenas no frenarán el proceso

24 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Paso a paso, el desafío soberanista avanza hacia el referendo. Un día después de que el Parlamento catalán aprobara los primeros presupuestos de la Generalitat que incluyen una referencia explícita a la cita ilegal, el Gobierno catalán se puso manos a la obra y sacó a concurso el primer contrato para la organización de la votación, el suministro de los sobres y las papeletas.

El anuncio salió publicado en la página de licitaciones de la Generalitat, pero en ningún momento hace alusión al referendo sino que habla en genérico de material para la celebración de «elecciones al Parlamento». Se trata de una estratagema para tratar de burlar la impugnación por parte del Gobierno central y también para blindarse ante una eventual querella de la Fiscalía, pues todos los miembros del Ejecutivo catalán están advertidos de su deber de paralizar o impedir cualquier iniciativa relacionada con el despliegue de la hoja de ruta independentista, en especial el referendo.

De hecho, los propios presupuestos de la Generalitat incluyen una partida de millones para «procesos electorales y participativos». La estrategia es antigua y la patentó Artur Mas para el 9N. «Tenemos que engañar al Estado», dijo entonces. El resultado fue un referendo presentado como proceso participativo, aunque el truco no funcionó, ya que cuatro de los responsables del 9N han sido condenados a penas de inhabilitación. Eso sí, Mas se salió en parte con la suya, ya que la votación pudo celebrarse.

En este caso, el Gobierno catalán se cubre las espaldas de dos maneras. Por un lado, puede ir avanzando en la preparación del referendo sin el temor a que los recursos al Constitucional supongan un obstáculo, y por otro, no descartable, puede ir ultimando la cita electoral, si la consulta no pudiera celebrarse y la legislatura se precipita antes de tiempo. Pero el Gobierno autonómico no puede reconocer este último extremo, porque estaría asumiendo que no habrá referendo y la CUP le retiraría su apoyo.

Plazos

En cualquier caso, los 18 meses establecidos como tiempo de duración de la legislatura expiran el 10 de julio, por lo que en ningún caso los comicios están muy lejos, ya que la hoja de ruta aprobada por Junts pel Sí y la CUP fija que las elecciones constituyentes deberían tener lugar seis meses después del referendo previsto para septiembre. Es decir, como muy tarde, según los planes de los independentistas, dentro de un año debería haber comicios, haya o no cita ilegal. Una de las opciones que está sobre la mesa es hacer coincidir el mismo día elecciones y consulta, pero la CUP rechaza todo lo que no sea un referendo. «No avalaremos ningún sucedáneo, ninguna alternativa ni envoltorio. No estamos para bromas», avisó la portavoz antisistema Anna Gabriel.

El referendo, a la espera de que Carles Puigdemont le dé el empujón definitivo cuando fije la fecha y determine la pregunta, avanza paso a paso y hoy dará uno más con la sesión constitutiva de la ponencia conjunta que debe elaborar la propuesta de reforma del reglamento del Parlamento catalán, que los independentistas impulsan para tener las manos libres para aprobar la ley de transitoriedad jurídica por la vía exprés.

La fase del referendo unilateral se ha puesto en marcha y es imparable, según advirtió el vicepresidente del Gobierno catalán, Oriol Junqueras. El dirigente republicano advirtió al Ejecutivo central y a los poderes del Estado de que las condenas, como las que pesan sobre Mas, Joana Ortega, Irene Rigau y Francesc Homs, no frenarán su convocatoria. «Lo que hacemos es infinitamente más importante y relevante que la inhabilitación de una persona», dijo. Junqueras, que es responsable de la organización de la consulta, reveló que la «arquitectura» de la misma está «muy bien diseñada» y todo el mundo sabe los pasos que tiene que seguir. El líder de Esquerra, que sugirió además que la ley de transitoriedad jurídica podría dejar sin efecto las inhabilitaciones de Mas y Homs, apuntó que organizar el referendo no es a su juicio anticonstitucional.

PP, PSOE y C'S recurrirán los presupuestos

El Partido Popular y Ciudadanos recurrirán de forma conjunta ante el Tribunal Constitucional la ley catalana de presupuestos que dedica una partida a la convocatoria del referendo independentista en Cataluña. También lo hará, pero individualmente, el PSOE, según confirmó ayer su portavoz en el Congreso, Antonio Hernando. «Hasta los propios letrados de la Cámara catalana creen que es inconstitucional», recalcó el diputado socialista.