Las bases de Podemos en Cataluña rechazan diluirse en el nuevo partido de Ada Colau

La Voz C. R. BARCELONA / COLPISA

ESPAÑA

Alberto Estévez | EFE

La decisión genera otro foco de tensión interna en la formación tras el congreso de Vista Alegre II

21 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Tras el congreso de Vista Alegre II, que se saldó con la derrota de Íñigo Errejón, a la formación morada se le abre otro foco de tensión interna, en este caso en Cataluña. Podem, la marca de Podemos en la comunidad catalana, no participará en la creación del partido que Iniciativa per Catalunya, Equo y los Comunes de Ada Colau ultiman para las próximas elecciones catalanas.

Hasta la fecha, todas esas formaciones habían confluido electoralmente y habían unido sus fuerzas en forma de coalición, pero la intención, después de ganar las últimas elecciones generales en Cataluña, fue ir más allá y crear un partido de izquierdas, soberanista y catalanista entre todos, con aspiraciones a gobernar en Cataluña. El PSUC del siglo XXI se vendió en un primer momento.

Sin embargo, Podem siempre puso pegas desde el primer día. No tanto desde el punto de vista ideológico, como en el orgánico, pues considera que tiene más peso en cuanto a número de simpatizantes que el resto de fuerzas. Y lo que en un primer momento se presentó como un pulso para ganar cuotas de poder en el seno de la nueva formación, que está previsto que nazca el 8 de abril, al final ha acabado por convertirse en un órdago en toda regla, que pone en peligro la confluencia de toda la izquierda alternativa catalana no independentista y que debilita el proyecto que lideran Ada Colau y Xavier Domènech y que aspiraba a hacer frente a Esquerra y al PDeCAT en los próximos comicios catalanes.

La dirección de Podem decidió convocar una consulta interna para determinar si aceptaba las condiciones de la confluencia, y las bases han apostado por no confluir.

Participación del 7,5 %

El secretario general del partido morado en Cataluña, Albano Dante Fachín, dio ayer a conocer los resultados de esta votación, que registró una participación muy baja, lo que pone en cuestión su gestión al frente de la dirección. En concreto, solo votaron un 7,5 % de los 52.000 simpatizantes que tienen los morados en Cataluña, aunque con posterioridad la ejecutiva habló de inscritos activos, para poder decir que la participación fue superior al 10 %. En cualquier caso, un 62 % rechazó la confluencia orgánica, frente al 37 %. Podem emplazó eso sí al resto de fuerzas a hacer una nueva propuesta de confluencia, aunque no descarta sumarse al proyecto a través de una coalición para las elecciones.

Albano Dante Fachín, próximo a los anticapitalistas, ha defendido la autonomía de Podem desde que asumió el liderazgo regional.

Iglesias, consciente del tirón electoral de la alcaldesa de Barcelona

Pablo Iglesias apuesta con el acercamiento a los Comunes. El secretario general de Podemos es consciente de que si su partido se impuso en las pasadas generales en Cataluña fue gracias al tirón electoral de Colau. Por eso todo lo que contraríe a la alcaldesa de Barcelona, y los resultados de esta consulta lo han hecho, suponen un riesgo innecesario para los intereses nacionales de Podemos. Desde Barcelona en Comú pidieron «generosidad y valentía» a los podemitas.