PSOE, Ciudadanos y Podemos se unen para que se investigue la caja B del PP

Enrique Clemente Navarro
Enrique Clemente MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

Rajoy contraataca forzando una comisión en el Senado sobre todos los partidos

09 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Habrá comisión de investigación en el Congreso sobre la presunta caja B del PP. Ante la negativa de Mariano Rajoy a constituirla en esta Cámara, el PSOE, Unidos Podemos y Ciudadanos llegaron a un acuerdo que se plasmó ayer en la presentación en el registro de una solicitud conjunta para que en 15 días el pleno del Congreso vote su puesta en marcha. El objeto de la comisión será determinar las responsabilidades políticas por la presunta financiación ilegal del PP, en concreto «la existencia de diferentes redes de donaciones irregulares, adjudicaciones de contratos públicos y otros mecanismos de financiación irregular». Así como «el incumplimiento que de la existencia de estas prácticas, se derivaría de la legislación sobre incompatibilidades, de financiación de partidos políticos y de campañas electorales». Estará formada por cinco representantes del PP, cuatro del PSOE, otros cuatro de Unidos Podemos, tres de Ciudadanos, dos del Grupo Mixto, uno del PNV y otro de ERC. En un plazo de seis meses, que podrá ser prorrogado, elevará el dictamen con sus conclusiones al pleno del Congreso.

Socio desleal

El PP contraatacó rápidamente registrando, a su vez, sendas solicitudes para investigar las cuentas de todos los partidos, una en el Congreso y otra en el Senado, donde saldrá adelante porque tiene mayoría absoluta. El portavoz del PP, Rafael Hernando, cargó duramente contra Rivera, al que acusó de haber «fabricado» una coalición de partidos para «intentar desacreditar y atacar al PP con mentiras». Además, calificó como un «gesto de hostilidad» y una «deslealtad» que Ciudadanos impulse una comisión de investigación con el PSOE y Podemos.

El pacto tripartito surgió después de que Rajoy eludiera comprometerse a crear la comisión en la Cámara baja. Albert Rivera, consciente de que estaba en juego la credibilidad de su partido, negoció con los socialistas y Unidos Podemos. En la sesión de control del Congreso, el presidente del Gobierno ya había amagado con constituir la comisión en el Senado y extenderla a la financiación de todos los partidos. Se basó en que la literalidad del punto suscrito con C’s en el pacto de investidura no dice que la comisión se deba crear en el Congreso, aunque se sobreentiende, ni que no se pueda ampliar a los demás partidos, aunque solo habla de la financiación de los populares.

La mujer de Lot

Rajoy respondía a una pregunta de Rivera, quien, mientras aquel se explicaba, desde su escaño hacía gestos ostensibles golpeando su cara con la mano para dar a entender que es un caradura por incumplir el pacto. El presidente pidió a Rivera que se preocupe por asuntos como el paro, la dependencia o la estiba y que no mire hacia atrás y le advirtió: «No haga como la mujer de Lot, que quedó convertida en sal por mirar hacia atrás».