La investigación sobre la financiación ilegal de CDC salpica ya a Artur Mas

Doce años después de que Pasqual Maragall pronunciara la célebre frase de «ustedes tienen un problema, que se llama 3 %», por primera vez el expresidente de la Generalitat, Artur Mas, a quien iban dirigidas las palabras del exdirigente socialista, aparece directamente relacionado con una trama de cobro de comisiones irregulares de su partido, la antigua Convergència Democrática.

Según se desprende de la investigación del llamado caso 3 %, que instruye un juzgado de El Vendrell (Tarragona), que trata de determinar si CDC y sus fundaciones satélites cobraron comisiones ilegales de empresarios de la construcción a cambio de adjudicación de obras públicas, un constructor ha implicado al expresidente Artur Mas.

El empresario habría relatado, en el transcurso de la investigación, que mantuvo una reunión con Mas, antes de que fuera presidente de la Generalitat (2010-2015) y con el que entonces era su mano derecha al frente del partido, Germà Gordó, que con posterioridad fue consejero de Justicia. El Periódico de Catalunya informó ayer de que en el encuentro, celebrado en la antigua sede de CDC, Mas le dijo: «Tienes que hacer lo que este te diga», comentado en un contexto en el que hablaban de la realización de donaciones a cambio de contratos públicos.

El empresario, en su declaración en secreto ante el juez, señaló además que con posterioridad, Germà Gordó llegó a recriminarle estar haciendo pocas donaciones al partido. «No me estás obedeciendo», le habría dicho, lo que el constructor consideró propio de un «chantaje». Eso sí, el empresario anónimo aseguró que nunca más volvió a reunirse con el expresidente de la Generalitat.

La declaración del empresario de la construcción vuelve a poner en la picota a los dirigentes de CDC, en un caso, el del 3 %, en el que el extesorero de Convergència, Andreu Viloca, detenido el pasado día 2 en el marco de una macrooperación de la Guardia Civil, a instancias de la Fiscalía, contra la formación nacionalista, aparece como la pieza clave de la supuesta trama de cobro de comisiones.

Según un informe de la Fiscalía Anticorrupción que obra en el sumario del caso, Viloca era el nexo de unión entre los empresarios y la Administración catalana para la concesión de obra pública. A cambio de las adjudicaciones, las empresas hacían donaciones a la fundación CatDem, y por extensión a CDC. Las «evidencias asientan de forma contundente el rol de mediador o conseguidor» de Viloca, afirma el informe de la Fiscalía. Al parecer, el modus operandi siempre era el mismo: publicación del concurso, reuniones entre el empresario y Viloca y entre este y el licitador, concesión y donaciones a la fundación, que CDC siempre ha defendido que eran legales. Los concursos investigados a Viloca hacen referencia al 2011 y al 2013, siendo ya Mas presidente de la Generalitat, y afecta a los ayuntamientos de Torredembarra (donde se destapó el caso a partir de una denuncia de una concejala de ERC), Figueras, San Celoni, San Cugat y Lloret de Mar.

La Fiscalía concluye que las pruebas aportadas ponen de manifiesto una «clara relación ilegal entre los empresarios y las respectivas adjudicaciones de obras y servicios, consistente en el cobro de comisiones en nombre de CDC».

El líder nacionalista se hace la víctima y dice que es «guerra sucia» contra el independentismo

Artur Mas no se salió ni un milímetro del guion y, como cada vez que estalla un caso de corrupción que implica a su partido, acusó al Estado de guerra sucia para frenar el proceso soberanista. Mas afirmó en un acto del PDeCAT que los poderes del Estado tratan de «destruir» a la exCDC para impedir la independencia de Cataluña. «Van a por nosotros directamente desde que optamos por el Estado catalán», «saben que sin el PDeCAT no habrá independencia», aseguró. En cualquier caso, Mas evitó las referencias directas al caso 3 %, pero quien sí defendió a la formación nacionalista de las imputaciones de la Fiscalía fue el exalcalde de Barcelona, Xavier Trias, que negó que CDC cobrase dinero de empresas o personas «a cambio de algo». También se dejó ver en el acto que los exconvergentes celebraron en Barcelona Germà Gordó, que de esta forma quiso transmitir que no tiene por qué esconderse, a pesar de que aparezca señalado en el sumario del caso 3 %. «Todo es falso», dijo el exconsejero.

Desde la oposición, en cambio, cargaron con dureza contra Mas. Según la líder de Ciudadanos en Cataluña, Inés Arrimadas, CDC ha optado por la independencia para «tapar los casos de corrupción» con una estelada. En el PSC reclamaron a Mas que dé explicaciones, pues entienden que estamos ante hechos de una «gran gravedad». Si se confirman, «pediremos responsabilidades», dijeron los socialistas.

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