Interior disuelve e investiga a la brigada de «policía política»

m. s. p. MADRID / COLPISA

ESPAÑA

El ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido
El ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido Paco Campos | EFE

Quiere saber si ese grupo reabrió de forma ilegal investigaciones sobre casos ya sentenciados

11 feb 2017 . Actualizado a las 09:59 h.

El Ministerio del Interior ha ordenado abrir una investigación para determinar si la denominada policía política pudo incurrir en algún tipo de irregularidad al reabrir casos sentenciados por los tribunales, en particular los sumarios sobre el 11M o el chivatazo a ETA. La Policía ha decidido indagar sobre estas supuestas prácticas alegales después de que el ex número dos de la Policía Eugenio Pino haya revelado esta semana que bajo su mandato se realizaron informes confidenciales que no han visto la luz sobre la masacre de los trenes, el chivatazo en el bar Faisán o la desaparición del Marta del Castillo.

En el centro de las pesquisas está la Brigada de Análisis y Revisión de Casos (BARC), creada por el propio Pino en la primavera del 2012, solo unos meses después de la llegada del PP al poder, y en la que integró en principio a 70 agentes de su entera confianza y a los que puso bajo las órdenes de la Dirección Adjunta Operativa, que él dirigía. Estos agentes debían dedicarse a esclarecer los 500 homicidios sin autor conocido en España, pero, en realidad, buena parte de ellos -explican fuentes policiales- terminaron involucrados en maniobras poco ortodoxas. Entre otras, el intento de ligar a Artur Mas con cuentas en el extranjero; las presiones para registrar la sede de Convergència por el caso Palau; las investigaciones extrajudiciales sobre la agencia de detectives Método 3; las escuchas ilegales en el caso del pequeño Nicolás; el denominado informe P.I.S.A (Pablo Iglesias Sociedad Anónima); las conspiraciones sobre el ático de Ignacio González; o la falsa cuenta en Suiza del exalcalde de Barcelona Xavier Trías.

«La Dirección General de la Policía está verificando si existen o no esos informes a los que alude el ex director adjunto. En el caso de que se verifique su existencia se analizará si su contenido responde a los objetivos para los que fue creada la brigada», reconocieron fuentes de Interior. Al margen de esta investigación, el nuevo número dos del cuerpo, Florentino Villabona, ha decidido clausurar la BARC para apagar los últimos rescoldos de la policía política que dejó Pino en la institución antes de su jubilación hace siete meses. Villabona, que hace unos días cesó a uno de los hombres de confianza de Pino (el comisario Enrique García Castaño), ha ordenado enviar a todos los miembros de la BARC al futuro Centro Nacional de Desaparecidos, lejos de los centros de poder del cuerpo.