El PP pierde 6,6 millones de ayuda y el PSOE casi 4 tras los revolcones electorales

ramón gorriarán MADRID / COLPISA

ESPAÑA

Reparto de fondos tras el 26J
La Voz

Populares y socialistas perciben ahora un 25 % menos de los fondos asignados a partidos

30 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La pérdida de la mayoría absoluta no solo ha acarreado problemas políticos al PP, también le ha supuesto un serio quebranto en su tesorería. Los populares percibieron el año pasado 6,6 millones de euros menos que en el 2015 en concepto de subvenciones otorgadas por el Ministerio del Interior para sus gastos de funcionamiento ordinario. El descalabro, en coherencia con sus revolcones electorales, también alcanzó a los socialistas, que vieron mermadas las ayudas gubernamentales en casi cuatro millones.

La ley de partidos políticos establece que las formaciones reciben cada año una subvención del Ministerio del Interior para su actividad diaria, léase pago de nóminas, compras y alquileres de sedes y demás gastos no electorales. Los retrocesos de PP y PSOE en las elecciones generales del 20 de diciembre del 2015 y del 26 de junio del 2016 se tradujeron en una seria caída de sus ingresos por este concepto. Al revés que Podemos y Ciudadanos, que, como partían de cero al no haber participado en anteriores comicios de ámbito nacional, obtuvieron una formidable inyección económica.

Los populares recibieron 24,5 millones de euros para sus gastos ordinarios en el 2015, cuando aún vivían de las rentas de la mayoría absoluta (186 diputados de 350) alcanzada cuatro años antes. Pero en las elecciones del 20 de diciembre cayeron hasta los 123 escaños y seis meses después se recuperaron un poco para quedarse con 137 diputados. El retroceso se tradujo en unas subvenciones de Interior para el 2016 de casi 18 millones, en los que se incluyen el dinero recibido por sus candidaturas conjuntas con Foro, Unión del Pueblo Navarro y Partido Aragonés.

Un retroceso electoral que ha hecho daño en su tesorería, pero que podría haber sido peor si el PP no llega a remontar en las elecciones del 26 de junio. De acuerdo con la orden ministerial del 12 de febrero del año pasado, el partido que lidera Mariano Rajoy hubiera recibido en el 2016 algo más de 15 millones de euros si el baremo de referencia hubiera sido el de los comicios del 20 de diciembre. La merma para los populares en ese caso hubiera alcanzado los 9,5 millones, pero la recuperación de junio en las urnas (14 escaños más) permitió mitigar la pérdida en tres millones.

Un golpe financiero notable para una organización que se movía en el 2015 con un presupuesto del orden de los 50 millones y que, por ejemplo, recaudó por cuotas de afiliados poco más de tres millones de euros, según los últimos datos auditados por el Tribunal de Cuentas. Esta situación, según reconocen fuentes de la dirección popular, se ha traducido en una congelación de las contrataciones de personal y de servicios, un frenazo en la expansión territorial de las sedes, así como una política de mayor austeridad.

La bofetada económica de los socialistas no es mayor que la del PP en cifras absolutas, pero es mucho más dañina porque el PSOE ya había sufrido una gran sangría en las elecciones del 2011, cuando se hundió hasta el que parecía ser su suelo histórico de 110 diputados. Los socialistas, con Pedro Sánchez de líder y candidato, horadaron ese suelo tanto en diciembre del 2015, cayeron a los 90 escaños, como en junio pasado, con 85. Unos pésimos resultados que se tradujeron en las menores subvenciones gubernamentales de su historia reciente.

Gran sangría

El PSOE pasó de ingresar más de 20 millones de euros para sus gastos ordinarios en la última legislatura de José Luis Rodríguez Zapatero a percibir 16 millones (incluida la cantidad del PSC) con el paso a la oposición en el 2011. Cifra que menguó hasta los 12 largos tras el 20D y un poco menos después del 26J. Con esos ingresos, los socialistas, con presupuestos de unos 40 millones de los que algo más de cinco provienen de cuotas de la militancia, han restringido al máximo sus gastos.

Pese a todo, populares y socialistas son los grandes beneficiarios de las subvenciones de Interior, aunque cada vez menos. En el 2015, último año sin la presencia de Podemos y Ciudadanos, se llevaron el 77 % de los fondos asignados a los partidos. El año pasado tuvieron que conformarse con el 52 %.

Podemos y Ciudadanos se llevan 18 millones de la tarta de 52

El Ministerio del Interior distribuye cada año entre los partidos para sus gastos de funcionamiento unos 52,7 millones fijados en los Presupuestos Generales del Estado. De esa suma, los dos grandes partidos se llevaban hasta ahora la parte del león porque Podemos y Ciudadanos no recibían nada dado que no habían concurrido hasta diciembre del 2015 a las elecciones generales. Tras las dos últimas citas con las urnas, al partido de Pablo Iglesias y sus aliados autonómicos (En Comú, En Marea y Compromís) les correspondieron 11,2 millones. Izquierda Unida solo entró en el reparto de las subvenciones del tercer y cuarto trimestre del 2016 al presentarse el 26J en la alianza Unidos Podemos. Ciudadanos, por su parte, ingresó 6,9 millones.

Izquierda Unida se presentó en solitario el 20D y apenas sumó dos escaños, aunque recolectó casi un millón de votos. Recibió una subvención para sus gastos de un millón, euro arriba, euro abajo. En los comicios de junio, en cambio, formó parte de la alianza Unidos Podemos y obtuvo ocho. Interior le asignó 1,13 millones. La antigua Convergència cobró tras las elecciones de diciembre 635.000 euros, y tras las votaciones del 26D, ya como PDECat y con unos resultados desastrosos, recibió 580.000. Entre los demás partidos, las subvenciones de Interior apenas rebasan el millón de euros. Es el caso de Esquerra Republicana, 1,4. El PNV se queda en poco más de 732.000 euros y el resto bastante por debajo; Bildu llega a los 400.000 euros y Coalición Canaria ronda los 200.000.