Primera condena para un yihadista por autoadoctrinarse utilizando las redes sociales

Mateo Balín MADRID / COLPISA

ESPAÑA

El tribunal considera que el acusado colgó en su perfil de Facebook vídeos o fotos «de carácter radical y violento»

02 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Primera sentencia de la Audiencia Nacional por un delito de adoctrinamiento personal con finalidad terrorista, incluido en la reforma del Código Penal de 2015 referida al pacto antiyihadista. El tribunal de la sección tercera de la Sala de lo Penal ha condenado a dos años y medio de prisión al ciudadano de origen marroquí Mohamed Akaarir, detenido el miércoles en San Sebastián para que cumpla la pena por esta causa. El tribunal considera que el acusado colgó en su perfil de Facebook vídeos o fotos «de carácter radical y violento» desde febrero del 2015 hasta marzo pasado con los que habría realizado la «yihad mediática» a favor del Estado Islámico, «incitando a la incorporación a una organización o grupo terrorista o a colaborar con cualquiera de ellos o con sus fines», según el artículo 575.2 del Código Penal.

Expulsión de España

La sentencia, cuya ponente es la magistrada Clara Bayarri, establece la sustitución de la pena, una vez cumplidas las dos terceras partes de la misma (20 meses de cárcel), por la expulsión del territorio español por un período de seis años, así como la medida de libertad vigilada por otros cinco, una vez recuperada la posibilidad de regresar a España, donde el condenado tiene arraigo dado que su pareja es española y trabaja en una peluquería en Rentería.

La resolución detalla la dureza de muchos de los vídeos colgados por Mohamed, que «no precisan siquiera de la comprensión de cuanto en ellos se recita», puesto que «basta oír el tono de soflama de la voz de los discursos, el fluir de la música salmódica de unos, la vibrante y enardecedora de otros, la técnica agresiva de los vídeos o la técnica de depurado adoctrinamiento».

Fases de radicalización

Los magistrados explican que la evolución de los vídeos y mensajes guardados en Facebook siguen el proceso de adoctrinamiento a través de las redes diseñado por el Estado Islámico. La fase inicial se corresponde con la búsqueda, visión, guarda y publicación de vídeos y mensajes en los que muestra el sufrimiento de niños musulmanes o el trato que se da a las minorías musulmanas en Occidente, y en el que se inocula el concepto de «victimismo». La sentencia relata que el acusado también habría superado la segunda fase de adoctrinamiento, llamada de «culpabilización», en la que se equipara al musulmán que no se identifica con las víctimas y que no «ayuda» mediante la difusión en la red de «esta situación de masacre» como un mal musulmán. En este etapa, ya se han asumido los postulados del Estado Islámico.

El acusado habría superado también la tercera fase de adoctrinamiento, denominada «de solución», en cuanto se entiende que la violencia es el camino a seguir, así como la cuarta y última, la del «activismo», en la cual los últimos mensajes publicados por el acusado justifican la violencia y la preparación para la muerte.