Felipe VI hace un guiño a la eurorregión en el arranque de su visita a Portugal

Begoña Íñiguez LISBOA / E. LA VOZ

ESPAÑA

En su primer viaje de Estado en año y medio, alerta contra el pesimismo

29 nov 2016 . Actualizado a las 07:25 h.

Con el Gobierno desbloqueado y la legislatura en marcha, los reyes retoman su agenda internacional con un viaje a Portugal, un país estrechamente vinculado con la corona española. El primer viaje de Estado de Felipe VI y la reina Letizia en año y medio, comenzó en Oporto con un baño de multitudes en la plaza de A Liberdade, en donde no faltaron las banderas de ambos países ni las aclamaciones por la calle. Fue un inicio de jornada en donde los reyes recibieron de manos de Rui Moreira, alcalde de la localidad lusa, las llaves de la ciudad y brindaron con sus famosos vinos.

En el primero de los seis discursos que pronunciará en los tres días de visita a Portugal, Felipe VI puso en valor la pujanza de la Universidad de Oporto y de su Parque de Ciencia y Tecnología, que los reyes visitarán hoy. Felipe VI recordó «las excelentes relaciones comerciales entre la zona norte de Portugal y las regiones transfronterizas de España», sin duda un guiño a la eurorregión Galicia-Norte de Portugal y a la del Noroeste Transmontano-Duero, respaldado también por la elección de las ciudades que visita en esta gira. Primero fue Oporto, luego Guimarães y para finalizar Lisboa, al contrario de lo que ocurre habitualmente.

Según explicaron varias fuentes, se trata de gestos calculados en los que ha tenido mucho que ver el presidente de la república portuguesa, Marcelo Rebelo de Sousa, quien se ha involucrado de manera directa en la organización de la visita, centrada básicamente en la zona norte del país.

La fundación Serralves, en Boavista, fue la segunda parada de los monarcas en Oporto, para recorrer la exposición Materialidade e metamorfose, diseñada por el arquitecto Siza Vieira, donde se muestran 85 de las obras de Joan Miró propiedad del Estado luso, que a partir de enero se quedarán permanentemente en Oporto. Los monarcas almorzaron con los máximos responsables de la fundación. En este marco, Felipe VI destacó «la fructífera colaboración entre España y Portugal», un país que «no para de crecer y de hacerse más fuerte», y animó a los dos Estados a mirar el futuro con optimismo, porque, dijo citando a Gregorio Marañón, «el optimismo crea la ventura y el pesimismo crea la adversidad». El monarca tuvo también palabras de agradecimiento a la Fundación Serralves «por la excelente labor de difusión y mecenazgo del arte contemporáneo».

La primera jornada de los reyes en Portugal los llevó también hasta la localidad de Guimarães, lugar escogido por el presidente de la república para celebrar una cena de gala, en la que el Felipe VI destacó la universalidad de las lenguas portuguesa y española.

Comida con empresarios

Los reyes comenzarán su segundo día de visita a Portugal de nuevo en Oporto, para visitar el Parque de la Ciencia y Tecnología de la universidad, y visitar el Instituto de Investigación e Innovación en Sanidad. En ambas instituciones colaboran universidades e investigadores españoles, algunos de ellos gallegos. La agenda en Oporto culminará con un almuerzo con empresarios ibéricos, fundamentalmente de la región norte lusa y de Galicia.

Recorrido por las calles de Lisboa y cena con el primer ministro, Antonio Costa

La última etapa del viaje de los reyes a Portugal los llevará hoy a Lisboa, donde serán recibidos en el Ayuntamiento por su alcalde, Fernando Medina, que les entregará las llaves de la ciudad. También está previsto que el rey y la reina hagan un recorrido a pie por las calles de la capital lusa. La jornada finalizará con una cena ofrecida en el Palacio de las Necesidades por el primer ministro, Antonio Costa, en la que estarán presentes las máximas autoridades políticas del país. El momento más importante de la visita será, sin embargo, la intervención del rey ante la Asamblea de la República en una sesión solemne convocada mañana para la ocasión.