Pedro Sánchez aplaza su vuelta a la carretera y se prepara para una larga batalla

P. H. MADRID / COLPISA

ESPAÑA

BENITO ORDOÑEZ

De momento, el socialista se irá a Washington, invitado por el Partido Demócrata hasta el próximo jueves. Después empezará a diseñar su hoja de ruta

06 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

No cogió el coche el pasado lunes para recorrer «todos los rincones de España» ni lo cogerá mañana. Pedro Sánchez es consciente de que, si quiere recuperar la secretaría general del PSOE, tendrá que mantener la cabeza fría y prepararse para una carrera de larga distancia. Se lo han dicho esta semana algunos de sus colaboradores más cercanos, inquietos por el tono y el discurso empleados en la entrevista del domingo pasado con Jordi Évole. Y él ha decidido levantar el pie del acelerador.

De momento, Sánchez se irá a Washington, invitado por el Partido Demócrata hasta el próximo jueves, dos días después de las elecciones que dirimirán quién es el próximo presidente de Estados Unidos. Después empezará a diseñar su hoja de ruta. Con calma, dicen los suyos. No se trata de irse a dormir a las casas de los militantes, como cuando aún era para la mayoría un desconocido diputado madrileño sin apenas apoyo orgánico, sino de ir transformando algo tan etéreo como la indignación, la rabia e incluso la admiración de muchos militantes que no entendieron que su partido haya dejado gobernar al PP en apoyos sólidos.

Con la vista en la primavera

Si la gestora sigue adelante con sus planes, el congreso en el que el exlíder socialista aspira a medirse con Susana Díaz (solo una victoria o una derrota de la andaluza podría evitar que la guerra orgánica se cronifique porque de otro modo ella intentará ejercer siempre como polo de poder) no tendrá lugar hasta junio, como pronto. Los partidarios de Sánchez seguirán presionando para que el cónclave se celebre a más tardar en primavera. Pero nada les garantiza que vayan a tener éxito.

En paralelo al diseño de su estrategia, el equipo de Sánchez ha empezado a colaborar con el alcalde de Jun, José Antonio Rodríguez, para ver cuántos de los correos que respondieron a la campaña de Militantes en Pie -casi 90.000- son realmente aprovechables. Es decir, para analizar si sus firmantes son afiliados del partido a los que cabe contactar, no ya para exigir la celebración de un congreso extraordinario, porque lo que toca es un congreso ordinario, sino para algún tipo de colaboración.