Iglesias advierte a Errejón de que las corrientes no pueden ser partidos en Podemos

El líder de Podemos, Pablo Iglesias lanzó ayer un mensaje a Íñigo Errejón, secretario político de la formación morada, al que advirtió de que las corrientes internas no pueden convertirse en «partidos dentro del partido, porque esos nos haría parecer a los partidos viejos».

En su discurso de clausura en la Universidad de Verano de Podemos, celebrado en el campus de la Complutense, Iglesias pidió que la dirección de la formación que salga de la próxima asamblea no sea «ni pablista» ni «errejonista» y que represente «a todos».

Las diferentes visiones sobre el camino que debe tomar Podemos no son nuevas, pero se hicieron más latentes en la campaña electoral de las gallegas, cuando Iglesias y Errejón se enfrentaron de forma pública y con un intercambio de mensajes a través de Twitter, sobre la redefinición del proyecto de Podemos, su estrategia y el futuro del partido. Iglesias es partidario de un discurso duro, frente a la línea más favorable a atraer a nuevos votantes moderando el mensaje que defiende Errejón. El debate sobre el futuro político de Podemos también está detrás de las disputas que se están viendo en varias comunidades.

Ayer, el líder de Podemos volvió a mostrar el camino a seguir, sin medias tintas. «Si nos obsesionamos con parecer lo que no somos y con no dar miedo, no conseguiremos traer a los que faltan y se nos van una parte de los que estaban», alertó Iglesias, que, en cambio, sí coincide con Errejón en que el discurso sobre el «miedo» es un «debate viejo», semejante al ocurrido hace décadas entre «entre el PSOE y el PCE».

Iglesias volvió a rebatir a su número dos, encargado de la campaña en las elecciones del 26J, en las que Podemos se quedó por debajo de sus expectativas. «El partido -dijo- se presentó moderado en las formas y con propuestas socialdemócratas. Fue un error estratégico» porque «muchos ciudadanos no creyeron ese mensaje y pensaron que los dirigentes de Podemos éramos unos mentirosos». 

Guerra estática, no relámpago

Pese a estos dardos dirigidos a Errejón, responsable de la campaña del 26J en las que Podemos perdió un millón de votos, Iglesias pidió evitar los debates estratégicos sobre quien controla las listas electorales o los «órganos y aparatos» del partido, para que los medios de comunicación no se conviertan en el «campo de batalla» interno. Reconoció que el escenario político que se presenta en el futuro inmediato ya no es el de una «guerra relámpago», como en los dos primeros años de Podemos, sino un conflicto estático en la que será necesario «cavar trincheras para defender la posición del partido». «Trincheras en la sociedad civil», dijo, en las que «Podemos ya no está solo» porque le acompañan Izquierda Unida, En Comú o En Marea y por lo que es necesario tener siempre presente «la plurinacionalidad del Estado».

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