Díaz desafía a Sánchez y da por seguro que se va a convocar al comité federal

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

JULIO MUÑOZ | efe

La presidenta andaluza defiende la honradez y la honestidad de Griñán y Chaves

17 sep 2016 . Actualizado a las 09:13 h.

El conflicto interno creado en el PSOE en torno a la posibilidad de que su líder, Pedro Sánchez, intente formar Gobierno mediante un acuerdo que incluya a Podemos va a más. Aunque desde la dirección del partido no prevén la posibilidad de que tras las elecciones gallegas y vascas se convoque el comité federal para determinar qué posición se debe tomar respecto a la formación de Gobierno en España, la presidenta de Andalucía y secretaria general del PSOE andaluz, Susana Díaz, consideró ayer «seguro» que ese comité se va a convocar. Rechazó aclarar cuál es su posición de cara al futuro, pero se remitió a sus declaraciones anteriores, en las que rechazó cualquier intento de Sánchez de convertirse en presidente al afirmar que con 85 diputados «no se puede formar Gobierno».

«Ya dije el miércoles cuál es mi posición y a partir de ahora lo que tenga que decir lo diré en los órganos del partido», señaló. «Eso se hará seguro», añadió, sin embargo, respecto a la posibilidad de que se convoque el comité federal. Pero, ante la pregunta de si el sector crítico con Pedro Sánchez prepara una maniobra contra él en esa futura reunión, respondió: «No sé de qué me habla». Lo que sí reiteró Díaz es su negativa a que gobierne Mariano Rajoy. «Si quiere hacerle un gran servicio a este país, el servicio que podría hacer es coger y marcharse», afirmó.

El presidente de la Generalitat Valenciana y secretario general del PSPV, Ximo Puig, negó también que haya tensiones en el PSOE, aunque advirtió de que «los partidos están al servicio de la sociedad y el ombliguismo no es el camino». En el debate irrumpió también ayer, con su contundencia habitual, el expresidente socialista de Extremadura Juan Carlos Rodríguez Ibarra. «Si Pedro Sánchez forma Gobierno con Podemos y los independentistas, yo me voy del partido», afirmó, aunque dijo creer que el secretario general «no va a tener esa tentación» porque ni el comité federal ni los militantes lo aprobarían.

El clima de tensión que vive el PSOE, con acusaciones cruzadas a través de las redes sociales entre los partidarios de la actual dirección nacional y los críticos, ha enfriado el movimiento de acercamiento hacia Podemos iniciado por Sánchez, que pretendía reunirse con el líder de la formación morada, Pablo Iglesias, para estudiar un posible acuerdo. Esa reunión no tiene, a día de hoy, fecha de celebración.

Apoyo a Chaves y Griñán

Lo que no ha creado fisuras en el partido es la decisión de la Fiscalía de solicitar seis años de prisión para José Antonio Griñán, y 10 de inhabilitación para Manuel Chaves, ambos expresidentes de Andalucía y del PSOE. Un hecho que, según los críticos, debilita la posición de Susana Díaz, ya que la presión por este asunto se centra ahora en ella. La presidenta andaluza, que accedió precisamente al cargo gracias a la renuncia de Griñán tras su implicación en el caso de los ERE, hizo ayer una cerrada defensa de ambos y dijo confiar en su «honradez» y «honestidad» porque «a ninguno de los dos se les ha acusado de beneficiarse personalmente». Aseguró que ambos asumieron responsabilidades políticas «hace ya mucho tiempo» al dejar su escaño y la militancia en el PSOE, y que espera que la Justicia sea «implacable» con los que sí se beneficiaron en el caso de los ERE para que paguen «cuanto antes» y que «lo hagan bien».

Margallo compara los 741 millones de los ERE con los mil euros por los que se investiga a Barberá

El ministro de Exteriores en funciones y diputado del PP por Alicante, José Manuel García-Margallo, comparó ayer los 741 millones presuntamente malversados en el caso de los ERE irregulares en Andalucía con la donación de 1.000 euros por la que se investigará a la exalcaldesa de Valencia Rita Barberá. «La comparación de cifras es bastante elocuente, aquí hablamos de mil euros de donación a un partido y allí de una desviación de 741 millones de euros», dijo en una entrevista televisiva.

Margallo rechazó las críticas realizada por el expresidente socialista extremeño Juan Carlos Rodríguez Ibarra, que recalcó la oportunidad política de la Fiscalía en este caso. «Eso es lo de la viga (en el ojo propio) y la paja (en el ojo ajeno)», respondió, subrayando que al PP también le suceden situaciones similares. «Cuando nos pasa a nosotros está puesto en razón y cuando le pasa al PSOE es una persecución inquisitorial urdida por el PP», ironizó, antes de subrayar que «la Justicia tiene que actuar contra quien sea y en el momento que sea», porque «esa es la garantía que tienen los ciudadanos» contra la corrupción.

Barberá está siendo investigada por su participación en el caso Taula y reconoce haber hecho una donación de mil euros a su partido, pero no que esta se le reembolsase en dos billetes de 500. En el caso de los ERE, la Fiscalía ha pedido seis años de cárcel y 30 de inhabilitación para el expresidente de la Junta José Antonio Griñán y 10 de inhabilitación para su antecesor Manuel Chaves.