En Marea se registra como grupo parlamentario y llegará al Constitucional si es necesario
ESPAÑA
PP y PSOE rechazarán que tanto la confluencia gallega como la valenciana se constituyan al margen de Unidos Podemos, aunque facilitarán el grupo de Convergència, que no cumple los requisitos
26 jul 2016 . Actualizado a las 20:28 h.En Marea se ha registrado como grupo parlamentario propio en el Congreso, al margen de Unidos Podemos, y ha avanzado que está dispuesta a llevar su petición hasta las últimas consecuencias y llegar al Tribunal Constitucional si es necesario.
La portavoz de En Marea en el Congreso, Alexandra Fernández, tras registrar el grupo parlamentario ha defendido ante los periodistas su derecho a tener un grupo parlamentario propio y ha advertido, ante un posible rechazo de la Mesa del Congreso, de que «no se puede hacer un cambio de cromos con los grupos» ni «jugar» con los derechos.
Fernández ha avanzado que si la Mesa admite que Convergència Democràtica de Cataluña tenga grupo parlamentario sin «cumplir los requisitos», y no lo acepta para En Marea «la legalidad de la Cámara quedaría absolutamente en entredicho. Vamos a seguir luchando por que no se pongan vetos a la diversidad de voces en el Congreso», ha asegurado tras apostar por una Cámara democrática, plural y que represente la plurinacionalidad.
Preguntada por la decisión de En Comú Podem de renunciar finalmente a tener un grupo propio para integrarse en el grupo confederal de Unidos Podemos, Fernández ha expresado su máximo respeto, y ha indicado que eso solo evidencia que son «sujetos políticos diferentes» que toman sus decisiones de forma autónoma.
La portavoz de En Marea cree que no habrá problemas y que hay mecanismos para que si finalmente la Mesa rechaza su petición de grupo parlamentario, puedan integrarse en Unidos Podemos con todos los derechos, incluso el nombre diferenciado de la confluencia gallega y una portavocía adjunta, como tuvieron la legislatura pasada.
En cualquier caso, ha insistido en que con este gesto dan el primer paso para conseguir el grupo parlamentario propio y ha confiado en que la Mesa acepte su petición, en lugar de seguir bloqueando para continuar con un modelo en el que «se reparte todo entre el bipartidismo de siempre».
PP y PSOE rechazarán los grupos de En Marea y A la Valenciana
Previsiblemente, la petición de grupo propio por parte de la confluencia gallega no tendrá futuro, ya que tanto el Partido Popular como el PSOE y Ciudadanos han manifestado que rechazarán que En Marea y A la Valenciana se constituyan al margen de Unidos Podemos, aunque sí facilitarán, con el voto en contra de Ciudadanos, que Convergència constituya el suyo pese a no cumplir estrictamente con los requisitos que fija el Parlamento.
En su reunión de la semana pasada, la primera de la XII Legislatura, el órgano rector de la Cámara Baja acordó abrir un plazo, hasta las 20 horas de este martes, para solicitar la formación de grupos parlamentarios, peticiones sobre las que la Mesa resolverá este miércoles.
Se da por hecho que en esa reunión la nueva Mesa aceptará la creación de los grupos que hayan sumado al menos 15 diputados en las elecciones, condiciones que cumplen el PP, el PSOE, Unidos Podemos-En Comú Podem y Ciudadanos.
Pero también los que, aunque no lleguen a ese umbral mínimo, hayan logrado al menos cinco diputados y, además, reúnan el 5% de los votos a nivel nacional o bien un 15% en aquellas circunscripciones en las que se presentaron, una vía por la que accederán a tener grupo tanto ERC (con 9 diputados y el 18,17% de los votos en Cataluña), y el PNV, con cinco diputados y casi el 25% de los votos de Euskadi.
Caso distinto es el de CDC, ya que en los comicios de junio, aunque logró ocho diputados, no alcanzó el 15% de los votos en las cuatro provincias catalanas (quedó por debajo en Barcelona y Tarragona), y ni siquiera logró ese porcentaje en el conjunto de Cataluña (se quedó en el 14%), que había sido el argumento que esgrimieron PP y el PSOE en la Mesa del Congreso para permitirles formar grupo en enero.
En este escenario, CDC corría el riesgo de que, por primera vez en la reciente historia democrática, no contara con voz propia en Madrid, pero tanto el PP como el PSOE se han mostrado abiertos a que sus representantes en la Mesa del Congreso hagan una interpretación laxa del Reglamento y les faciliten tener grupo, lo que en su caso supone recibir más de 42.000 euros al mes. Ciudadanos, por su parte, rechazará esta opción.