Ambos organismos convocan a la compañía para estudiar sanciones después de otros 13 vuelos cancelados en Barcelona este domingo
04 jul 2016 . Actualizado a las 08:13 h.La Generalitat ha convocado a Vueling a una reunión de urgencia que se celebrará este lunes a las 17.00 con el fin de pedirle un «cambio de actitud» frente a los problemas con sus vuelos durante todo el fin de semana, unas incidencias por las cuales el Govern está estudiando sancionar a la aerolínea. Además, el Ministerio de Fomento ha abierto un expediente a la compañía por los problemas de los últimos días y ha convocado a la empresa a una reunión de urgencia para exigirle «explicaciones y medidas correctoras inmediatas».
En un comunicado, la Generalitat ha informado de que la reunión se celebrará a las 17 horas en la sede del departamento de Territorio y Sostenibilidad, y que a ella acudirán, en nombre del gobierno catalán, los consellers Jordi Baiget (Empresa y Conocimiento) y Josep Rull (Territorio y Sostenibilidad). La Agencia Española de Seguridad Aérea (Aesa), que depende de Fomento, ha sido el organismo encargado de abrir el expediente a Vueling «para esclarecer el origen» de las múltiples cancelaciones y retrasos de vuelos de la compañía, según han informado a Efe fuentes del ministerio que dirige Ana Pastor. Por su parte, Aviación Civil ha citado este lunes en la sede de Fomento al presidente de Vueling, Javier Sánchez-Prieto, «para escuchar sus explicaciones y sus planes para regularizar la situación».
Vueling continua este domingo acumulando cancelaciones y retrasos en los vuelos que tenía programados, por lo que sigue complicando el inicio de las vacaciones a miles de ciudadanos. Según se puede comprobar a través de la web de la compañía, hasta las diez de la mañana Vueling no había operado un total de 13 de los vuelos previstos para este domingo, aunque la aerolínea no ha facilitado su versión sobre estas incidencias.
La mayoría de estos vuelos cancelados tenían la salida prevista de madrugada y conectaban ciudades europeas. Cuatro de estos vuelos tenían prevista la llegada a Barcelona (desde Fráncfort, Dubrovnik, Ibiza y Málaga) y ampoco se ha operado uno que debía partir desde Barcelona a Málaga.
Miles de personas se vieron atrapadas en la terminal barcelonesa el sábado y, de rebote, en otros aeropuertos con los que conectaban los vuelos en conexión con Barcelona. Uno de ellos fue el de Lavacolla, donde al menos seis vuelos llegaron con demoras de varias horas, tres las sufrieron en las salidas y uno con destino a Zúrich fue cancelado.