Pedro Sánchez pide al PP que reconsidere celebrar el cara a cara aunque a Rajoy no le guste

Efe

ESPAÑA

JAVIER SORIANO | Afp

El secretario general del PSOE fija seis líneas rojas para lograr un pacto de gobierno tras las elecciones del 26J, entre los que destaca el no al referéndum y la derogación de la reforma laboral

26 may 2016 . Actualizado a las 15:01 h.

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha pedido este jueves que el PP reconsidere su negativa a aceptar un debate entre él y el presidente en funciones, Mariano Rajoy, aun a sabiendas de que al líder de los populares no le gusta «rendir cuentas». Así se ha manifestado el líder de los socialistas en una entrevista en La Sexta, durante la que, además, ha declarado que si el PSOE sale de las elecciones del 26 de junio como primer partido en España, «se abrirá el debate en Podemos» que ya se produjo después de su investidura fallida, a primeros de marzo.

Y entonces, ha dicho, «el ala moderada de Íñigo Errejón será más propicia a apoyar al Partido Socialista que el ala dura de Pablo Iglesias y de Monedero». A su juicio, el secretario general de Podemos «ha demostrado que prefiere vivir como líder de oposición ante un presidente retrógrado» como Rajoy que respaldar un Gobierno encabezado por él.

Sobre el formato, integrantes y número de los debates televisados que puedan organizarse durante la campaña, Sánchez se ha mostrado a favor de que haya debates a cuatro y uno a dos. «Yo creo que tiene que haber debates a cuatro y que entre el presidente en funciones y el líder de la oposición se tiene que celebrar un debate», han sido sus palabras.

Tras un acto de su partido en Madrid, Sánchez ha declarado en la entrevista que «lamentablemente» el PP ha rechazado esta propuesta de su partido, por lo que le ha pedido que la reconsidere aun a sabiendas de que «a Rajoy no le gusta rendir cuentas».

En Iglesias ha centrado buena parte de sus críticas, y así, le ha acusado de haber favorecido que el líder de los populares tenga ahora «una segunda vida» por bloquear el cambio que el PSOE representa. Ha añadido que «el problema no fue el acuerdo» de su partido con Ciudadanos, pues se trató de un pacto «progresista y reformista» ante el que Podemos perfectamente podía abstenerse, y ha asegurado que le gustaría que Iglesias «dejara de equivocarse» y vea por fin que el adversario es el líder del PP y no él.

Seis principios para pactar

Además, Sánchez ha presentado este jueves el documento Sí a los seis principios para el gobierno de cambio, en el que fija las líneas rojas para pactar después de las elecciones generales del 26 de junio, entre ellas, derogar la reforma laboral y rechazar el referéndum en Cataluña. Sánchez ha dado a conocer sus condiciones para alcanzar acuerdos de gobierno en un acto celebrado ante el Monumento a la Constitución en Madrid con el fin de dar solemnidad a su compromiso.

«El PSOE aspira a ganar las elecciones y antes de decir con quién queremos ir, queremos plantear a los españoles a dónde queremos ir», ha asegurado el candidato socialista en su declaración. Entre los seis principios innegociables para el PSOE, está el rechazo a un referéndum de autodeterminación en Cataluña, Galicia o País Vasco, aunque Sánchez ha insistido en su oferta de una reforma constitucional que avance hacia un modelo federal y reconozca la diversidad de los territorios. Frente «a quienes quieren romper España, el PSOE va a reivindicar el derecho a convivir unidos entre todos los españoles», ha subrayado Sánchez.

Otra de las líneas rojas para pactar es la derogación de la reforma laboral, la aprobación de un nuevo Estatuto de los Trabajadores y la puesta en marcha de un plan de choque contra el desempleo que favorezca, sobre todo, a los parados de larga duración. En el plano económico, el PSOE se compromete además a «no eludir la obligación de pagar la deuda pública».

Garantizar la independencia de las instituciones y rechazar el control político de la justicia, de las fuerzas de seguridad, de los órganos reguladores y de RTVE es otro de los puntos recogidos en el documento. En este apartado, el PSOE reitera que reformará el sistema de designación de los miembros de los principales órganos constitucionales y que derogará la conocida ley mordaza, además de revisar la legislación electoral para que las listas sean abiertas.

El PSOE incide además en que si gobierna, llevará a cabo una reforma fiscal justa y progresiva que contribuya al sostenimiento de las pensiones y de los servicios públicos y que revierta los recortes aplicados por el PP.

Los dos compromisos restantes que fijan los socialistas son reforzar la lucha contra la violencia de género y cumplir los compromisos con la UE, aunque renegociando los objetivos de déficit.