Rajoy asegura que «es imposible un Gobierno sin el PP y en contra del PP»

Agencias MADRID

ESPAÑA

SERGIO PEREZ | Reuters

El jefe del Ejecutivo ha criticado que el documento de negociación de Sánchez no defienda la unidad de España y ha evitado hablar de Rita Barberá 

10 feb 2016 . Actualizado a las 20:43 h.

El jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, ha advertido este miércoles de que a pesar de los intentos del líder del PSOE, Pedro Sánchez, es «imposible que en España pueda haber un Gobierno que se califique como tal en contra del PP» y sin contar con este partido, y ha considerado que ese intento no es lo más democrático.

Rajoy ha hecho esta advertencia en la reunión que ha mantenido con los senadores del PP antes de las entrevistas que protagonizará esta semana con Sánchez y con el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, y en la que ha acusado al secretario general del PSOE de ignorar en sus negociaciones la unidad de España y de no rechazar claramente el derecho de autodeterminación.

El jefe del Ejecutivo ha señalado que los números pueden propiciar una investidura como la de Sánchez, pero «la falta de coherencia de quienes la apoyarán, las discrepancias ideológicas y los intereses dispares» harían imposible que pudiera gobernar. Por ello, ha subrayado que «no se puede engañar a la gente» y él no piensa hacerlo, porque los ciudadanos deben saber que con las «operaciones» que plantea el líder socialista de que «vote uno o se abstenga otro», no se puede gobernar.

Como tampoco se puede, ha avisado, gobernar con 90 diputados -los del PSOE-, 130 -los que sumarían socialistas y Ciudadanos- o 160 -aglutinando PSOE y Podemos-. «Hay que decirles la verdad, y es que, en minoría, no se puede gobernar», ha recalcado.

Rajoy ha advertido también de que en este proceso hacia la investidura, el PP «no va a entrar en ningún juego ni se va a abstener en nada» porque es el partido que ha ganado las elecciones y «va a defender su victoria».

Son argumentos que ha dicho que trasladará a Sánchez y a Rivera en las reuniones que mantendrá con ellos esta semana y en las que volverá a defender un gobierno sustentado por PP, PSOE y Ciudadanos al considerar que es el que mejor responde a los intereses de España.

A Sánchez le reprochará además el proceso negociador que encabeza porque cree que aunque la política tiene «una parte de escenificación», necesita algo más que «movimientos y ruedas de prensa». «Necesita iniciativas, seriedad y sentido común», y «con noventa diputados no se puede», ha reiterado.

Y especialmente crítico ha sido con el hecho de que el documento de negociación de Sánchez con otros partidos y, en una muestra de «irresponsabilidad», no defienda expresamente la unidad de España ni muestre con claridad su rechazo al derecho de autodeterminación. «Es verdaderamente sorprendente que en ese documento no se hable para nada del problema más importante que tiene España ahora, como es la amenaza independentista en Cataluña», ha señalado.

El jefe del Ejecutivo ha afeado también a Sánchez que proponga sólo «en un renglón» una reforma de la Constitución para la que ha advertido de que no tendría ni los votos ni los apoyos suficientes para llevarla adelante. 

Rajoy evita pronunciarse sobre Barberá

Tras su reunión con los senadores populares Mariano Rajoy ha evitado pronunciarse sobre la senadora Rita Barberá y la operación Taula, que investiga la presunta corrupción del grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Valencia. Durante su discurso ante el Grupo Popular del Senado sí que ha hecho una breve mención a la lucha contra la corrupción, incluyendo por primera vez este asunto entre los «cinco grandes objetivos» de la legislatura.

Barberá no ha acudido a esa reunión del PP en la Cámara Alta que ha presidido Rajoy y también este martes faltó a la constitución de la Diputación Permanente y de las comisiones Constitucional y de Economía en las que la ha situado su partido esta legislatura. Su presencia en la Diputación Permanente garantiza que siga aforada aunque se repitan las elecciones.

A su llegada al Senado, los periodistas han preguntado a Rajoy si no cree que la situación de Barberá empieza a ser insostenible, pero el presidente no ha respondido. Al terminar la reunión con sus parlamentarios, se le ha vuelto a preguntar si ha hablado con la exregidora y por qué se la blinda en la Cámara Alta. De nuevo el jefe del Ejecutivo ha rehusado contestar y se ha limitado a decir: «Buenos días».