Un acusado afirma que el Govern balear eligió a Nóos porque estaba detrás Urdangarin

Agencias

ESPAÑA

 El exgerente de la Fundación Illesport, Gonzalo Bernal
El exgerente de la Fundación Illesport, Gonzalo Bernal Atienza | Efe

«No entrábamos a valorar nada, todo nos venía acordado», destaca Gonzalo Bernal, en el juicio por el caso Nóos

11 feb 2016 . Actualizado a las 11:30 h.

El exgerente de la Fundación pública Illesport Gonzalo Bernal ha asegurado hoy ante el tribunal que el Govern balear eligió al Instituto Nóos para organizar un foro sobre turismo y deporte en Palma «por la persona que había detrás del Instituto Nóos, que era Iñaki Urdangarin».

Bernal ha detallado que tanto la contratación de una oficina de seguimiento del equipo ciclista patrocinado por la comunidad autónoma como ese primer Illes Balears Forum se hicieron por estar amparados por el marido de la infanta, ha dicho en su declaración como acusado ante el tribunal que juzga el caso Nóos.

Por los dos congresos Illes Balears Forum y la oficina del equipo ciclista, Nóos percibió 2,5 millones de euros del Govern balear. «El equipo ciclista se presentó a través de Iñaki Urdangarin. Iñaki Urdangarin estaba dentro del paquete en la oficina del proyecto, con lo cual entiendo que era importante que estuviera esta persona para contratarla», ha asegurado al inicio de la tercera jornada de la vista oral que se celebra en la Escuela Balear de la Administración Pública (EBAP).

El exgerente de fundación contrató esa oficina por 300.000 euros, que financiaron a medias Illesport y el Instituto Balear de Turismo (Ibatur), según la orden de la Presidencia del Govern: «Era una instrucción que venía dada de crear la oficina de proyecto del equipo ciclista y gestionarlo». Tampoco cuestionaron la elección que hizo Nóos de la empresa que analizó el impacto en medios de comunicación del patrocinio, ni el precio que pagó por ello el Govern balear, ni la posterior rescisión de ese contrato que también decidió un empleado del Instituto, Juan Pablo Molinero.

Bernal ha admitido numerosas irregularidades en la gestión cotidiana de la Fundación Illesport, comenzando por su propia designación como gerente, que se acordó en una reunión de la junta de patronos cuya acta fue redactada por él mismo, que ni siquiera asistió a la misma. «Yo no asistí pero me consta que es la única que se celebró de todas», ha dicho sobre las supuestas reuniones de ese patronato, que en realidad nunca se celebraron aunque varias actas digan lo contrario.

Todas las decisiones y acuerdos de la Fundación Illesport que se plasmaban en las actas llegaban desde la cúspide del ejecutivo autonómico: «Lo normal es que viniesen aprobadas desde la Presidencia del Govern», ha dicho Bernal. No obstante, Bernal nunca recibió órdenes directamente del presidente Jaume Matas, sino a través de su jefa de gabinete, Dulce Linares o del entonces director general de Deportes, José Luis «Pepote» Ballester. 

«No entrábamos a valorar nada, todo nos venía acordado»

Al inicio de su declaración, Bernal ha señalado que los contratos con Iñaki Urdangarin, «por el importe y la materia», eran decididos de antemano por el expresidente del Govern balear. «No entrábamos a valorar nada, todo nos venía acordado», ha incidido.

Tajante en sus respuestas, Bernal ha especificado que, en relación a la puesta en marcha de una oficina para el seguimiento del equipo ciclista Illes Balears-Banesto propuesta por Urdangarin, mantuvo una reunión con el exsocio de éste Diego Torres y otros exaltos cargos de Baleares para abordar la gestión del proyecto puesto que tanto su impulso como su precio -150.000 euros públicos más IVA- «ya estaban adoptados».

De hecho, a preguntas de la fiscal anticorrupción Ana Lamas, ha relatado que «mucho antes» de la formalización del contrato para la materialización de esta iniciativa «se habían venido haciendo actividades y trabajado en ello». Bernal ha subrayado además que el patronato del Illesport, del que salían los fondos para el pago de la oficina ciclista, nunca se reunió y, por tanto, nunca debatió ni adoptó decisión alguna. Según ha dicho, él era el encargado de firmar las actas que reflejaban que el órgano se reunía, pero todas ellas eran simuladas.