El nacionalismo vaticina que se abrirá el melón de la reforma constitucional

La Voz

ESPAÑA

Vence defiende la unión de fuerzas nacionalistas y galleguistas.
Vence defiende la unión de fuerzas nacionalistas y galleguistas. SANDRA ALONSO

28 sep 2015 . Actualizado a las 04:00 h.

En Galicia, las fuerzas nacionalistas hicieron una lectura diferente a la de los dos grandes partidos. El portavoz nacional del BNG, Xavier Vence, argumentó ayer que la cita electoral ha evidenciado una alta participación, lo que significa que el debate sobre la cuestión territorial involucra a gran parte de la sociedad catalana y da al resultado una enorme legitimidad democrática.

A pesar de que las alternativas soberanistas ceden terreno en cuanto a representación respecto al 2012, Vence defendió que «a proposta independestista conta cun respaldo maioritario da cidadanía» en lo que se refiere al número de escaños y muy cerca «da metade dos votos». Según el BNG, no se pueden considerar como sufragios contrarios a la independencia los recabados por la plataforma Catalunya Sí que es Pot, toda vez que se trata de una candidatura que ha ido por otro camino «por razóns de proxecto social».

Con todo, para el portavoz nacional del BNG, lo más relevante es el futuro que se abre. Más allá de lo que pueda suceder con Cataluña, Vence sostiene que se abre necesariamente el debate sobre la revisión del modelo constitucional y el derecho a decidir de las naciones. Un asunto, a su juicio, que deberá colocarse en el primer lugar de la agenda política.

«As eleccións deixan tamén otras lecturas, como os fracasos estrepitosos de Podemos e do Partido Popular», sostuvo el portavoz del Bloque. Desde Anova, la pata nacionalista de la coalición Alternativa Galega de Esquerda (AGE), Xosé Manuel Beiras recordó que pese a la intensa estrategia de criminalización del nacionalismo, con la amenaza de la salida de la UE y la huida de los bancos, la ciudadanía catalana se ha mostrado mayoritariamente a favor de la soberanía y del derecho a decidir.

Beiras, que a lo largo de la campaña admitió que si estuviera en Cataluña votaría a la CUP, lanzó un recado al Gobierno liderado por Mariano Rajoy.

«Agora é preciso saber se o que opina o pobo abonda ou se vai facer como cos gregos, que decidiron unha cousa, pero ninguén lles fixo caso: agardo que se tome nota da vontade da cidadanía por mudar un réxime, como o do 1978, que está podre», sostuvo el líder de Anova.