«Hay unos pocos que gritan mucho, pero la mayoría quiere más autonomía, no la independencia»

Toda la familia de Matilde Bremón (A Coruña, 1967) es coruñesa. Por el trabajo de su padre, sin embargo, se crió en Madrid y, a los 13 años, llegó a Barcelona, donde ejerce la abogacía. «Aun así, me siento gallega. Es un sentimiento que a ningún gallego se le quita», asegura.

-¿Cómo se llega a esta situación?

-Siempre ha existido. Los catalanes se sienten muy catalanes. Mis hijos son bilingües: hablan conmigo castellano y catalán con su padre. Yo llegué con 13 años de Madrid y no sabía dónde estaba.

-La convivencia siempre ha sido tranquila.

-Y aún lo es. Creo que hay unos pocos que gritan mucho, que la gran mayoría quiere más autonomía, pero no la independencia. Aquí se paga un dineral por autopistas y aparcamientos, los impuestos son mucho más altos.

-¿Un pacto fiscal aliviaría?

-Creo que sí y que, en el fondo, es lo que se pretende. Lo más beneficioso sería un Estado federal.

-Tras reformar la Constitución.

-Sí. Una reforma constitucional desde el respeto, ¿por qué no? Yo de lo que estoy en contra es de quienes pretenden conseguir las cosas saltándose la ley a la torera.

-La banca ha amenazado con un corralito. ¿Este tipo de discurso puede causar el efecto contrario?

-Hay miedo, eso es evidente. La independencia supondría un esfuerzo económico. La gente piensa: ?¿Ahora que estamos saliendo de una crisis en la que llevamos metidos profundamente ocho años, pedís otro esfuerzo??.

-Las encuestas dan mayoría absoluta a Junts pel Sí.

-Creo que no ganará. Las formas de Mas, pidiendo a los catalanes que den un corte de mangas a PP, PSOE y Podemos, son feas. Éramos un país muy tranquilo, pero cada vez las maneras son más agresivas.

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