Urkullu insta a los alcaldes vascos a reconocer a «todas» las víctimas de la violencia

mateo balín MADRID / COLPISA

ESPAÑA

LUIS TEJIDO | EFE

Críticas al lendakari por mezclar en su homenaje a los asesinados por ETA con los muertos por las fuerzas de seguridad

05 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El Gobierno vasco reunió ayer a 114 de los 130 alcaldes de diferente signo político en cuyos municipios hubo muertes entre 1960 y el 2010. Con este simbólico acto trataba de homenajear a las víctimas de estas localidades con la entrega a sus regidores de un documento que detalla todos estos crímenes, titulado los retratos de la memoria. Los 16 alcaldes que no pudieron viajar a Bilbao se disculparon y el Ejecutivo autonómico acordó mandarles el citado libro de la memoria.

En la entrega, el lendakari Íñigo Urkullu afirmó que «habremos dado un gran paso cuando todos coincidamos en un reconocimiento integrador de todas las víctimas, al margen del signo de la violencia que las haya producido». Añadió que «no debe quedar ninguna duda de que matar a otra persona es la más grave de las injusticias y el peor error posible».

El alcalde de Irún, el socialista José Antonio Santano, pidió a los regidores de EH Bildu «su impulso para que la izquierda abertzale reconozca los errores del pasado y para que desde lo local se den pasos que deslegitimen la violencia». Reclamó «una condena expresa del uso de la violencia para conseguir objetivos políticos como los que ETA pretendía obtener».

Aburto, regidor bilbaíno del PNV, afirmó que «si queremos construir una sociedad inclusiva necesitamos superar la violencia, deslegitimar la violencia y reconocer el daño causado».

El documento Retratos Municipales de la Memoria recoge los nombres y datos personales de los 707 muertos en el País Vasco por ETA y grupos afines (572), GAL, Grupos Armados Españoles, Batallón Vasco Español y Triple A (61), así como por las fuerzas de seguridad (58). También se incluyen 16 fallecimientos de «autoría confusa».

El Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite) criticó que se deje en manos de los municipios la gestión de la memoria, «lo que supone permitir que quienes justifican a ETA construyan la memoria de sus víctimas, una irresponsabilidad política que constituye un peligro terrible para las nuevas generaciones». Desde el PP vasco, Nerea Llanos aseguró que el lendakari ha dado una «bofetada a las víctimas del terrorismo» y le instó a cambiar de actitud, porque «al terrorismo hay que llamarlo así y a las víctimas hay que reconocerlas como tales»