La Embajada de Israel en España tilda de «censura antisemita» el veto a Matisyahu 

EFE MADRID

ESPAÑA

TOBIAS SCHWARZ| AFP

La organización del Festival Rototom, celebrado en Benicassim, anunció el pasado día 15 la cancelación del concierto del músico judío por no pronunciarse «abiertamente» sobre si Palestina tiene derecho a tener un estado propio y sobre si rechaza cualquier tipo de violencia

19 ago 2015 . Actualizado a las 09:48 h.

La Embajada de Israel en España considera una «censura ideológica con tintes antisemitas» la cancelación del concierto de Matisyahu en el Festival Rototom de Benicassim. La organización de este evento anunció el pasado día 15 la cancelación de la actuación del músico reggae judío estadounidense por no pronunciarse «abiertamente» sobre si Palestina tiene derecho a tener un estado propio y sobre si rechaza formalmente cualquier tipo de violencia.

La Embajada de Israel «condena rotundamente» esta decisión en un comunicado de prensa, en el que afirma que los organizadores del Rototom «han discriminado de forma intolerable al cantante». «La Embajada se opone al boicot cultural en cualquiera de sus formas por considerarlo un atentado contra la libertad de expresión artística», manifiesta la representación diplomática de Israel.

La cancelación de la asistencia del artista judío estuvo precedida por una campaña de Boicot, Desinversions y Sancios (BDS) a Israel del País Valencià, que pidió a los participantes en el concierto que consideraran su asistencia si acudía Matisyahu. Para BDS, Matisyahu es «un artista reggae judío estadounidense que ha participado en festivales 'prosionistas', ha reconocido ser un amante de Israel y ha llegado a afirmar que Palestina no existe».

Varios de los participantes declinaron entonces acudir al Rototom por lo que los organizadores, tras no encontrar respuesta por parte del artista judío a su petición de que se pronunciara sobre Palestina, decidieron cancelar su actuación prevista para el día 22 de agosto.

La Federación de Comunidades Judías de España (FCJE) calificó de «cobarde, injusta y discriminatoria» esta deicisón y también la Generalitat Valenciana ha cuestionado la decisión tomada por los organizadores. «No se puede forzar a nadie a que opine; si se le contrató seguramente fue por criterios artísticos», ha manifestado el secretario autonómico de Cultura y Deporte, Albert Girona.