Interior localiza 179 presos susceptibles de convertirse en radicales yihadistas

EFE MADRID

ESPAÑA

J. J. Guillén

Así ha informado este lunes Francisco Martínez, secretario de Estado de Seguridad,  que ha recalcado las medidas llevadas a cabo por España para combatir el terrorismo yihaddista

27 jul 2015 . Actualizado a las 17:16 h.

El Ministerio del Interior ha detectado en las cárceles a 179 presos susceptibles de radicalizarse o de ejercer labores de captación al yihadismo, entre los que se encuentran 10 mujeres y 79 condenados por su relación con el terrorismo internacional, a los cuales se les vigila de forma específica. Son datos que ha ofrecido este lunes el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, durante la inauguración de la cumbre que el Comité contra el Terrorismo del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas celebra en Madrid para debatir sobre cómo frenar el flujo de combatientes terroristas extranjeros, en la que ha estado acompañado de Ignacio Ybañez, secretario de Estado de Asuntos Exteriores

Martinez ha recalcado al importancia de combatir contra el terrorismo yihadista, no solo desde una dimensión policial, sino también con una en «intensa labor preventiva» y una «adecuada contra-narrativa que evite la radicalización». Ha enumerado las medidas que se llevan a cabo en España para luchar contra este fenómeno, y ha reconocido que la situación de amenaza en nuestro país ha obligado a elevar hasta cuatro el nivel de alerta antiterrorista en una escala de cinco niveles.

La fusión de dos centros en el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO), el plan estratégico nacional de lucha contra la radicalización violenta, el de prevención de la radicalización en las cárceles o el pacto de estado contra el terrorismo yihadista suscrito entre el Gobierno, PP y PSOE son algunas de las recientes medidas que ha resaltado Martínez.

Por otra parte, ha citado la tipificación penal del fenómeno de los combatientes terroristas extranjeros; del adoctrinamiento y el adiestramiento militar, incluido el pasivo, o la mejora de las capacidades en las investigaciones tecnológicas prevista en la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal.