Íñigo Errejón, suspendido de empleo y sueldo por la Universidad de Málaga, que le abre expediente

Efe

ESPAÑA

Un expediente informativo ha reunido indicios de comportamientos que no se ajustarían a lo acordado entre la Universidad y el político de Podemos, que cobra 1.825 euros al mes de la institución. Íñigo Errejón ha denunciado una «cacería» contra Podemos

04 dic 2014 . Actualizado a las 20:29 h.

El secretario de Política de Podemos, Íñigo Errejón, ha sido suspendido provisionalmente de empleo y sueldo por la Universidad de Málaga -donde es investigador- y le han abierto un expediente disciplinario, al igual que al también dirigente de Podemos y profesor responsable de la investigación, Alberto Montero.

La resolución de la Universidad malagueña (UMA) se deriva del expediente informativo que incoó esta institución el pasado 21 de noviembre para aclarar si Errejón incumplió sus obligaciones laborales y si vulneró la Ley de Incompatibilidades al participar en un proyecto de investigación. La decisión de ahora agota la vía administrativa, aunque se puede interponer un recurso de reposición en el plazo de un mes ante la rectora, Adelaida de la Calle, que firma el documento, o un recurso contencioso-administrativo.

El expediente informativo pretendía comprobar si Íñigo Errejón estaba en su puesto de trabajo y durante su desarrollo se han reunido indicios de comportamientos que no se ajustarían a lo acordado. El contrato estipula que debía estar 40 horas semanales trabajando en la Universidad, por lo que percibe 1.825 euros al mes. En el caso del profesor colaborador Alberto Montero, la apertura del expediente está relacionada con su obligación de supervisar y controlar el cumplimiento de la tarea como responsable del proyecto.

Antes de hacerse efectiva la medida cautelar de la suspensión de funciones (empleo y sueldo) de Errejón, contratado en régimen laboral hasta el 16 de diciembre como investigador externo, pueden alegar lo que consideren oportuno tanto él como el comité de empresa en un plazo de diez días.

Procedimiento disciplinario

El expediente informativo se abrió en su día en relación con el cumplimiento del contrato laboral suscrito por Errejón con cargo al contrato de servicios suscrito por la Universidad con la Agencia de Obra Pública de la Junta de Andalucía, dependiente de la Consejería de Fomento y Vivienda, para el proyecto investigador. Ese proyecto de I+D+i se denomina «La vivienda en Andalucía: diagnóstico, análisis y propuestas de políticas públicas para la desmercantilización de la vivienda», Montero solicitó su elaboración en una convocatoria de la Consejería y le fue concedida. El proyecto preveía contratar un investigador externo y la Universidad de Málaga lo hizo a través de una convocatoria pública, para lo que fijó un perfil que exigía -entre otros requisitos- ser doctor en Ciencias Políticas y a la que únicamente concurrió Íñigo Errejón, que ganó el contrato en marzo pasado. Alberto Montero presentó ante la Consejería de Fomento, financiadora del proyecto, informes periódicos trimestrales de los resultados y en septiembre comunicó a la Universidad que Errejón no podría seguir desempeñando su labor como contratado, por lo que solicitó que se volviera a convocar su plaza. La Universidad malagueña lo hizo el 8 de octubre en una convocatoria hasta el 22 de octubre, pero no concurrió nadie.

La presidenta de la Junta andaluza, Susana Díaz, llegó a asegurar en su día que Errejón tendrá que devolver el dinero que ha recibido para una tarea de investigación «si no ha trabajado o actuado correctamente».

Error administrativo

Alberto Montero, eldirector del proyecto en el que participaba Errejón, confía en que la institución académica haya abierto con «buen criterio» el expediente disciplinario a ambos y que lo concluya «con el mismo criterio». Sospecha que «todo responde a algún error en el proceso administrativo; no creo que sea por nada más». Así, el profesor universitario e integrante de la dirección nacional de Podemos ha aclarado que en la comunicación recibida no se le detallan las causas por las que se adopta esta decisión, pero también ha dicho que «confío mucho en la institución para la que trabajo», añadiendo, en consecuencia, que «confío en que el expediente se cierre conforme se tenga que cerrar, me da igual». Eso sí, ha apuntado, «espero que se justifique cuál es el motivo de la apertura y que se cierre conforme a ese motivo; no le doy más importancia». De hecho, ha manifestado a Europa Press que «si veo que los motivos que argumentan son razonables, que me impongan la sanción correspondiente; no voy a pelear contra molinos de viento; tengo muchas más cosas que hacer, entre ellas la investigación para la que me pagan».

Errejón denuncia una cacería contra Podemos

El secretario de Política de Podemos, Íñigo Errejón, ha denunciado una «cacería» contra Podemos tras declararse satisfecho porque la Universidad de Málaga, ha dicho, no ha encontrado irregularidades en su contrato ni en su trabajo y sólo ha constatado la falta de «un papel» para pedir la compatibilidad.

En declaraciones a Efe, Errejón ha valorado la resolución de la Universidad de Málaga (UMA), donde es investigador, que le ha abierto un expediente disciplinario y le ha suspendido provisionalmente de empleo y sueldo, según ha explicado el dirigente de Podemos, por no haber cumplido ese trámite administrativo.

El secretario de Política de Podemos ha señalado que, «después de días de mucho ruido», en los que se han dicho cosas «muy injustas», la Universidad ha cerrado el expediente informativo incoado el pasado 21 de noviembre concluyendo que no ha habido ningún problema con el contrato ni con el trabajo realizado ni con su dedicación y, simplemente, ha señalado que faltaba el trámite administrativo de haber solicitado la compatibilidad para poder trabajar desde Madrid.

Tras expresar su respeto por los trabajadores de la Universidad de Málaga, que han tenido, ha subrayado, que desarrollar sus funciones en un «clima general de presión», Errejón se ha declarado «oorgulloso» de que «después de tanto ruido» se haya demostrado que sólo faltaba «un papel», y ahora, ha añadido, esperará a que se diriman las consecuencias administrativas de ese error.