Multas, tortillas y la intimidad de Esperanza Aguirre

Efe

ESPAÑA

SERGIO PEREZ | Reuters

La presidenta del PP madrileño critica que se haya hecho público que su coche volvió a ser multado mientras uno de sus empleados recogía unas tortillas

05 oct 2014 . Actualizado a las 12:35 h.

La presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, ha cargado este domingo contra los agentes de movilidad por el «ataque a la intimidad» que supone divulgar datos de personas multadas después de que días atrás su coche volviera a estar en el centro de la polémica y se sancionara a su conductor.

Aguirre ha tildado de «absolutamente increíble e inclasificable» que se cuente a la prensa «lo que lleva dentro un coche», ha señalado en una entrevista en la Cadena Cope, donde también ha aclarado que el conductor iba a recoger a una mujer nonagenaria. «Son datos que los agentes municipales no están para divulgar. Que si iba a comprar unas tortillas... Imagine que fuera a una relación sentimental que no quieren divulgar», ha señalado visiblemente molesta.

La vicesecretaria del PP de Madrid, Gádor Ongil, ya manifestó su «estupor por el hecho de que se revelen datos, algunos de ellos totalmente falsos y privados, de los ciudadanos a los que se multan». «Al parecer fueron los mismos agentes de movilidad que multaron a Aguirre, algo que resulta llamativo, los mismos que multaron a una persona que conducía su coche, según hemos visto con todo detalle en los medios de comunicación, donde se habla incluso de que la persona que conducía el vehículo bajó a comprar unas tortillas, algo increíble y dudoso de que sea legal si nos atenemos a lo que dice la Ley de Protección de Datos», señaló Ongil.

Para Ongil «es muy preocupante que se filtren datos personales de los ciudadanos a los que se multa y, es más, que se den hasta los detalles personales de que se hace cuando uno se baja del coche». La vicesecretaria del PP de Madrid entiende que es «indignante que cosas así puedan ocurrir cuando los datos personales están protegidos, máxime cuando además afecta a una persona pública, en este caso a la presidenta del PP de Madrid, que tiene notable repercusión».

De doble fila a carga y descarga

Dos de los seis agentes de Movilidad del Ayuntamiento de Madrid que intervinieron en el incidente de tráfico que protagonizó Esperanza Aguirre en abril en la Gran Vía han vuelto a sancionar el pasado viernes su vehículo por estacionar en doble fila. En esta ocasión el coche (un Toyota Versus blanco) no lo conducía la presidenta del PP madrileño sino un empleado del servicio de la expresidenta regional y de su marido, Fernando Ramírez de Haro.

El vehículo fue sancionado por aparcar en doble fila cuando, a primera hora de la tarde, el hombre que iba al volante ha dejado en doble fila en la calle de Ferraz (distrito de Moncloa), a la altura del número 98. Los agentes se han acercado al coche y tras advertir al chófer de que ahí no podía estar, este ha continuado la marcha y ha aparcado más adelante en una zona de carga y descarga. Tras percatarse de la maniobra, los agentes han decidido multarle por aparcar en doble fila.