Rajoy insiste en su reforma electoral para que gobierne el alcalde más votado

Enrique Clemente Navarro
Enrique Clemente MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

José Manuel Barreiro afirmó ayer que el PP está dispuesto a negociar la reforma electoral.
José Manuel Barreiro afirmó ayer que el PP está dispuesto a negociar la reforma electoral. Alberto López< / span>

Pedro Sánchez denuncia que por primera vez lo quiera hacer sin consenso

26 ago 2014 . Actualizado a las 10:49 h.

El rechazo en bloque de la oposición no ha hecho dar marcha atrás a Mariano Rajoy, quien ayer insistió en su intención de reformar la ley electoral para primar la elección como alcalde del candidato de la lista más votada, antes de las elecciones municipales de mayo del año que viene. El presidente del Gobierno manifestó en Santiago, durante su rueda de prensa conjunta con Angela Merkel, que es «mucho más respetuoso con la voluntad de los ciudadanos» que sea alcalde quien obtenga más votos que este salga de un pacto entre tres, cuatro o cinco partidos políticos, según informa Domingos Sampedro.

El líder del PP consideró llamativo que haya tantas críticas a la propuesta cuando «ni siquiera se ha planteado formalmente», y recordó que el PSOE incluyó en su programa electoral una reforma en el mismo sentido. Por ello, dijo que o los socialistas «estaban muy equivocados» entonces o la propuesta «no es tan mala», ya que, además, ese sistema de elección de alcaldes se aplica en varios países de la UE.

Lo que no desveló es si está dispuesto a que el PP apruebe la reforma en solitario, lo que no tendría precedentes desde 1978. En febrero del 2013, Rajoy aseguró que nunca modificaría la ley electoral por mayoría, ya que «hay consensos que se deben preservar».

El presidente avanzó que en los próximos días se reunirá con su partido para definir la propuesta que, insistió, intentará negociar con las demás fuerzas políticas. Aunque no lo ha confirmado oficialmente, la fórmula que propondrá el PP es que el cabeza de la lista más votada se convierta automáticamente en alcalde si consigue superar la barrera del 40 % de los votos y saca cinco puntos de ventaja a la segunda. En caso de que no fuera así, habría una segunda vuelta entre los dos primeros.

Pero el PSOE no está por la labor de negociar, ya que considera que se trata de una maniobra electoral de los populares para tratar de salvar los ayuntamientos que ven en peligro, que supone cambiar las reglas del juego a solo nueve meses de las elecciones.

Su secretario general, Pedro Sánchez, echó en cara a Rajoy que «por primera vez en democracia», el PP haya planteado cambiar la ley electoral «sin el consenso del principal partido de la oposición». «Si esa es una actitud para negociar, pues me dirá qué es rechazar esa actitud para negociar», señaló.

Por su parte, IU rechazó entrar a negociar la reforma e invitó al PSOE, si es que de verdad está en contra de ese «golpe de Estado a la democracia municipal para blindar el poder del PP en los ayuntamientos», a que haga lo mismo. Así se expresó su coordinador federal, Cayo Lara, quien dijo que IU no va ser «cómplice» de esta propuesta de «degeneración democrática» y advirtió de que recurrirán a todos los instrumentos institucionales para tratar de impedir que salga adelante.

El presidente del PP de Lugo y portavoz en el Senado, José Manuel Barreiro, aseguró que su partido «no propone una postura cerrada», sino que está abierto a negociar «para ajustar el modelo de elección a la voluntad popular». Señaló que le llama la atención la postura del PSOE, que «en otras elecciones recogía en su programa modificaciones en este sentido, pero parece que ahora no están dispuestos a hablar».