Leonor «destrona» a Urdangarin

Alfonso Andrade Lago
alfonso andrade MADRID /ENVIADO ESPECIAL

ESPAÑA

Benito Ordóñez

El Museo de Cera de Madrid prescinde de la infanta Elena y de los duques de Palma, y hoy presenta un busto en arcilla de la nueva princesa de Asturias

18 jun 2014 . Actualizado a las 12:06 h.

El juez Castro no es el único español que está atando corto a Urdangarin y a la infanta Cristina. El Museo de Cera de Madrid se carga hoy las figuras de la pareja. En la sala monárquica se podrá ver en cambio un busto en arcilla de la princesa de Asturias, la infanta Leonor.

El verdadero motivo por el que la joven princesa desbanca a doña Cristina y Urdangarin es que el matrimonio dejará de pertenecer oficialmente a la familia real al sentarse Felipe VI en el trono. Por eso desaparece también Elena de Borbón, pero lo cierto es que los visitantes del museo madrileño estaban encantados ayer con la noticia, que asumieron como si se tratase de un juicio sumarísimo.

«¡Ya no sé qué hacían aquí! Mejor la niña», bromea Míriam Cuevas, a la que hay que recordar que se trata solo de figuras de cera. «Es que me pongo fatal», se excusa. Verónica y Aridia vienen de Torrejón. Les preguntamos qué miembro de la familia real tiene peor imagen. Al unísono: «¡Casi todos!».

Los visitantes son más condescendientes con la llegada del busto de Leonor, sangre nueva. En el taller le dan los últimos retoques. De las paredes cuelgan varias fotos de la infanta que sirven de modelo para un trabajo en arcilla que es el paso previo a la creación de la figura de cera. «Pero era imposible tenerla lista en tan poco tiempo, así que presentaremos mañana [por hoy] esta cabeza, y más adelante, la escultura completa», explica Gonzalo Presa, del departamento de Comunicación del museo. El busto solo se exhibirá hoy. Después se retirará para seguir trabajando en la escultura, que podría estar lista «en un mes y medio». Lucirá el vestido que lleve puesto durante la ceremonia de proclamación.

«Y haremos algo parecido con los los reyes entrantes y salientes; les cambiaremos la ropa más adelante, en cuanto veamos lo que se ponen para el Congreso». Presa confirma que se va a empezar también la figura «de doña Sofía», la hermana de Leonor.

El proceso de modelado en arcilla «lleva su tiempo» porque es de gran precisión. Una vez obtenida la imagen en cera, es necesario fijar «dientes, ojos y cabello» hasta darle el aspecto con que se presenta finalmente ante el público.

Miguel Rojas y Mónica, su novia, vienen de Oviedo. Sugieren «el traslado inmediato de Urdangarin a la sala del terror». Su figura se exhibe ahora en la zona de deportistas y no con la familia real.

En realidad, la primera persona a la que entrevistamos en el museo (no podía ser de otro modo)... es gallega: Chelo Méndez, de Vigo.

-¿De La Voz de Galicia? ¿Aquí? Non o podo crer.

-Tampouco eu.

-É verdade iso de que hai un galego na Lúa.

-Vai ser, si.

A Chelo le parece perfecto fundir al Urdangarin de cera. «Co que fixo... Mira». Respecto al cambio de monarca, es condescendiente: «Xa non podía». Su consuegra, Mari Cruz González, madrileña, sale en regia defensa de don Juan Carlos. «Hay que reconocerle el mérito que ha tenido. También alguna equivocación, pero oye, tiene que tener sus diversiones». Está claro: los elefantes esperan con impaciencia su versión en cera.