Quiere emular a los alemanes, que modificaron su ley fundamental con calma y pluralismo
15 abr 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Alfredo Pérez Rubalcaba quiere que esta legislatura sirva al menos para poner los cimientos de una reforma constitucional que dé respuesta, entre otras cosas, a los problemas de Cataluña y del modelo territorial. El líder del PSOE tiene ya una idea en mente, seguir el esquema de trabajo empleado por los alemanes entre 2003 y 2005 para acometer la 52 modificación de su ley fundamental y crear una comisión parlamentaria abierta a agentes sociales y económicos, representantes de los gobiernos autonómicos y locales y expertos en disciplinas como el derecho, la economía y las ciencias políticas, cuya finalidad sería elevar una propuesta concreta a las Cortes.
Rubalcaba se plantea esperar a que pasen las elecciones europeas para tratar de convencer al presidente del Gobierno de que la suya es la única salida. El esquema del líder de la oposición no implica necesariamente una reforma inmediata. En Alemania se tardaron cuatro años.
Independientemente de los escenarios temporales, lo que convence al líder de la oposición es el procedimiento empleado en Alemania. «Nosotros no queremos una propuesta de reforma constitucional que lleve nombre y apellidos», remarcó ayer en una entrevista en Catalunya Ràdio. Rubalcaba reiteró que el rechazo del Congreso al referendo de autodeterminación que plantean el presidente de la Generalitat con CiU, Esquerra, Iniciativa y las CUP no debería ser entendido como el final del proceso de diálogo -que, en cualquier caso, nunca ha llegado a producirse- sino como el momento a partir del cual sentarse a hablar. «Queremos diagnosticar los problemas para buscar el acuerdo, abrir un diálogo sobre soluciones, pactar y votar», manifestó Pérez Rubalcaba en la entrevista.
De momento, su discurso cae en saco roto. El portavoz del Gobierno catalán, Francesc Homs, le replicó ayer mismo que en Cataluña ya se han puesto de acuerdo partidos «bien diferentes» para formular una propuesta sobre cómo quieren las relaciones con el resto de España. Y desde el PP le afearon que haga propuestas así por su cuenta.