PSA Vigo aspira a fabricar para toda Europa en exclusiva el Peugeot 208

Soledad Antón García
Soledad Antón VIGO / LA VOZ

ECONOMÍA

© Arnd Wiegmann | Reuters

Dirección y trabajadores esperan que Tavares confirme mañana la adjudicación

18 may 2016 . Actualizado a las 00:18 h.

En PSA Vigo ya nadie pone en duda que la multinacional adjudicará a la planta de Balaídos el segundo modelo que necesita no solo para garantizarse el mantenimiento de las dos líneas de montaje, sino para volver a situarse en 500.000 unidades de producción, números a los que ni de lejos se acerca desde el 2007. Con la visita que mañana tiene previsto realizar a la factoría el presidente del grupo, Carlos Tavares, puede llegar la confirmación. «Vamos a demostrarle la eficiencia de la planta y luego veremos qué noticias tenemos», afirmaba el director de Vigo, Yann Martin, la pasada semana.

Las expectativas son enormes y en Vigo esperan que el patrón de PSA anuncie que a partir del 2019 se montarán en la planta de Balaídos todas las siluetas de la nueva generación del Peugeot 208. Sería sobre una nueva plataforma diseñada conjuntamente por la multinacional gala y la china Dongfeng. Los actuales Peugeot 208 se fabrican, además de en la planta francesa de Poissy, en la eslovaca de Trnava y, para el mercado americano, en la brasileña de Porto Real.

Si finalmente Tavares confirma la adjudicación del modelo a la factoría gallega, Vigo sería el único centro de Europa en el que se montaría. La previsión es fabricar unas 200.000 unidades al año. La producción para el mercado asiático se haría en China. Dongfeng entró en el capital del grupo PSA con un 14 % de las acciones. Lo hizo en un momento económico especialmente delicado para la multinacional francesa, en el que también salió al rescate el Gobierno galo, que es titular de otro 14 %.

La llegada del nuevo proyecto representa una década de tranquilidad para la planta de Vigo, ya que contaría con dos lanzamientos en apenas un año. La nueva generación de furgonetas (K-9), que sustituirá a las actuales Berlingo y Partner, empezará a comercializarse en el primer trimestre del 2018, en tanto la nueva generación del Peugeot 208 llegaría al mercado en el 2019.

Se pueden cumplir dos de los objetivos que se ha marcado la dirección: mantener el sistema de doble línea fabricación -Balaídos es una de las contadas fábricas del grupo que tiene dos cadenas de montaje-, y arrancar prácticamente al mismo tiempo con dos lanzamientos, de forma que puede aspirar a la saturación, que ha sido una de las consignas de Carlos Tavares desde que accedió a la presidencia.

Las furgonetas Berlingo y Partner han sido la única apuesta segura de la planta durante el último lustro, pero son modelos muy maduros que necesitaban el relevo ya anunciado. Por otra parte, ni los sedanes ni el monovolumen C-4 han respondido a las expectativas por diferentes motivos, entre otros los conflictos políticos suscitados en buena parte de los mercados a los que en principio estaban destinados el C-Elysée y el Peugeot 301. Por su parte, los monovolúmenes han perdido fuelle frente al nuevo concepto de todocamino.

PSA trabaja con la perspectiva de reducir considerablemente la fabricación de vehículos con motores diésel. Estima que la demanda de este segmento puede bajar hasta un 50 % en un futuro inmediato.

Hechos los deberes

Con el fin de garantizarse los nuevos modelos, la planta de Vigo lleva un año preparándose. Realizando inversiones -100 millones de euros en el 2015- y pactando medidas de ajuste de plantilla con los sindicatos. Todo en nombre de la competitividad. En ese camino, la planta ha contado con el acompañamiento de la industria auxiliar, que también ha hecho los deberes en la misma línea. En el caso del proyecto K-9, la industria gallega de componentes ha captado contratos por importe de 500 millones de euros y se ha garantizado la fabricación de hasta un 6 % más de piezas de las que ahora realiza para las furgonetas.