Stradivarius conquista Japón

SOCIEDAD

Abre en Osaka la tienda 900, el segundo establecimiento más grande de la firma de ropa juvenil. Una «flagship» que invita a viajar al modernismo más onírico

16 nov 2014 . Actualizado a las 11:19 h.

Bohème es luminosa. De personalidad reposada aunque sin perder la feminidad que la caracteriza. Es detallista. Habla un lenguaje suave. Se viste principalmente de blanco y gris. Esta podría ser la definición del nuevo concepto de tienda que Stradivarius ha presentado estos días en Japón, con motivo de la apertura de la tienda 900 en Osaka. No es su aterrizaje en el país asiático, de hecho es la séptima tienda, pero la inauguración de esta en concreto, la segunda más grande del mundo después de la de Portal del Ángel, en Barcelona, ha supuesto sin duda una gran apuesta de la firma gallega en una tierra que marca tendencia.

La tienda más grande de Japón, que se ubica en el distrito comercial de Shinsaibashi, abrió sus puertas la semana pasada. El nuevo establecimiento, de 720 metros cuadrados de superficie comercial repartidos en dos plantas, se convierte en el principal exponente de la nueva imagen de la cadena en Japón.

La luz es uno de los aspectos más importantes de la nueva tienda, un elemento que también se traslada a la fachada, clara y vistosa, gracias a que está delimitada por un marco de iluminación perimetral. Los escaparates con más de siete metros de altura dotan al espacio de gran transparencia y hacen que los transeúntes puedan ver el exterior de la tienda desde la calle. En el interior, el protagonismo arquitectónico se lo lleva la escalera de doble tramo, situada al fondo de la tienda y realizada en mármol yugoslavo blanco, un elemento único diseñado especialmente para la tienda de Shinsaibashi.

En un escenario como este se congregaron numerosos invitados la semana pasada para conocer de cerca las propuestas de moda joven femenina para la próxima temporada, y además recibieron en primicia la revista de moda de la cadena The Event Paper, que se presentó el pasado octubre en Barcelona, coincidiendo con la celebración del 20 aniversario de la firma. La publicación contiene imágenes exclusivas de la fiesta a la que acudieron celebrities internacionales como Poppy Delevingne o Harley Newton junto a famosas españolas como Úrsula Corberó.

La tienda de Osaka es un espacio que nos transporta al modernismo más onírico, una línea en la que convergen perfectamente estilos antagónicos como el industrial y el romántico. Sobre este concepto han trabajado el equipo de obras y decoración de Stradivarius, con el objetivo de conseguir una nueva tienda acogedora y envolvente donde la clientela pueda disfrutar de la experiencia de compra. La fuerza radica en el significado de cada detalle, claramente visible y reconocible en zonas como suelo, paredes y techo. El suelo combina baldosas con mosaico hidráulico, el techo combina papel decorativo con lámparas vintage, pero quizás la principal novedad en cuanto a la decoración esté en las paredes, ya que la tienda integra lonas textiles retro iluminadas que revisten toda la superficie. El diseño varía según las necesidades y tendencias de cada temporada. Así, la tienda se transforma siguiendo la melodía que marca la moda y aporta el carácter propio de Stradivarius.

Estar presente en el mercado asiático no supone ningún cambio en la filosofía de la cadena gallega, puesto que presenta las mismas colecciones que en otras partes del mundo, y únicamente refuerza las tallas más pequeñas debido a la fisonomía de la clientela femenina.

¿Dónde está el rincón secreto?

Este nuevo concepto de tienda integra elementos hechos a mano como maniquíes en clave craft, molduras artesonadas, así como pomos de puerta, cajones y colgadores envejecidos. Piezas que perfectamente podríamos encontrar en una galería de antigüedades.

Hace más o menos año y medio que Stradivarius estrenó este nuevo concepto de tienda, de hecho aquí en España ya se puede visitar en ciudades como Madrid o Barcelona, y sí hay algo que se ha conseguido con esta apuesta es crear un ambiente realmente femenino. En La Bohème los complementos siguen teniendo un peso importante con un espacio dedicado completamente a ellos. Un lugar que respira frescura y romanticismo a partes iguales, con un toque de fantasía ya que conviven en él el mobiliario propio de un jardín de ensueño junto con armarios y divanes propios de una habitación interior. Es el ?rincón secreto? de la tienda. A finales de año Stradivarius contará con 87 tiendas Bohème entre nuevas aperturas y reformas. La nueva imagen también se puede ver en el recién estrenado espacio de la firma en Marineda City, en A Coruña.

¿Qué se llevará el próximo invierno?

Siguiendo la enseña de Stradivarius que se caracteriza por vestir a una mujer actual, cosmopolita, femenina, interesada por la moda que anda entre los 20 y los 30 años, se presenta la colección de la próxima temporada de invierno. Un invierno nómada en clave elegante y con un punto de sofisticación chic. Una propuesta que se desarrolla en un escenario de playa de arena blanca y virgen y escasa vegetación que no hace más que destacar la belleza de las líneas simples y depuradas de una colección joven, fresca y de tendencia.

Una temporada más el tándem formado por los fotógrafos Bela Adler y Salvador Fresneda inmortalizan la belleza de las modelos Ymre Stiekema y Tess Hellfeuer que repiten como protagonistas de una temporada invernal cargada de blanco, modernidad y siluetas femeninas con mucho estilo.

Así pues con Winter Nomadic, una de las colecciones, nos adentramos en la alta montaña a base de tejidos cálidos y prints al más puro estilo Aspen. Reinan las chaquetas, chalecos e incluso accesorios de pelo (siempre sintético) con dosis de color, así como el tricot en toda sus versiones. Los abrigos aparecen en clave masculina, furry (de tejidos peludos) o en versión capa; y el poncho se convierte en la pieza estrella y accesorio XL versátil que combinar con cualquier outfit de invierno consiguiendo así una sensación de calidez única. La tendencia boho inspiración 70´s llega del otoño con fuerza para establecerse en invierno como pieza indiscutible de un nuevo folk de inspiración itinerante.

Por otra parte, aparece la colección ¡Hey, Tom boy! basada en líneas estructuradas y rectas, algunas dosis de oversize y color block. Se perfilan como algunos de los must have de la temporada: el abrigo masculino, el pantalón ancho (de vestir o en cualquier versión denim), el oversize pea coat... Los colores crudos (desde el blanco al tostado), los negros y un toque burgundy destacan por encima de cualquier otro elemento.

También el punto como tejido estrella de la temporada adquiere una nueva dimensión con aplicaciones, bordados o prints que desafían al estilo normcore. Las pailletes aparecen en faldas cortas y combinadas con piezas sport dando lugar a nueva era dentro del chic más joven y desenfadado.