Rajoy incluye en su ronda de contactos para formar Gobierno a los independentistas catalanes

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

ELECCIONES 2016

Ballesteros | EFE

Sáenz de Santamaría admite que el líder del PP lleva el proceso «de su mano» con «discreción y rigor»

02 jul 2016 . Actualizado a las 17:48 h.

Que a Mariano Rajoy no le gusta negociar bajo los focos y que detesta las filtraciones es algo ya conocido. Pero el líder del PP está llevando con tanto hermetismo el proceso de apertura del diálogo para tratar de garantizarse el Gobierno que desconcierta incluso a lo suyos. En pocos días ha modificado varias veces el guion. Rajoy no se quiere cerrar ninguna vía, por complicada que parezca. Y la novedad es que, al contrario de lo que hizo tras el 20D, va a incluir a los independentistas catalanes en la ronda de consultas que tiene pensado abrir. La justificación es que la situación ha cambiado con CDC y ERC, y se ponen como ejemplo los contactos de Rajoy con el presidente catalán, Carles Puigdemont.

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, admitió el viernes que Rajoy lleva este proceso «de su mano» con «discreción, seriedad y rigor» y evitando la exposición pública. «La intención es hablar con todos los grupos políticos», señaló la número dos del Gobierno, que insistió en que la prioridad sigue siendo pactar con los socialistas. «No cabe ninguna duda de que el PSOE, como segunda fuerza política y dentro del marco constitucional, forma parte del núcleo esencial de las negociaciones», explicó.

Calendario

Pero el método y el calendario siguen sin estar claros. De momento, Rajoy solo ha tenido oficialmente una conversación telefónica con el líder de Coalición Canaria, con el que se reunirá el martes, aunque no se descarta que haya habido otros contactos telefónicos que no se hayan hecho públicos. Sáenz de Santamaría explicó además que no habrá información sobre cómo van esos contactos hasta que haya «cuestiones concretas», más allá de «los tanteos iniciales».

Lo que no se prevé es que durante el fin de semana se produzcan reuniones relevantes con algún dirigente político. La intención es que tanto el socialista Pedro Sánchez como el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, tengan tiempo de reposar los resultados electorales y dispongan de espacio para diseñar unas estrategias más constructivas que el veto a la investidura de Rajoy que ambos mantienen hasta ahora.

El método de apagar las luces y silenciar los micrófonos que ha escogido Rajoy favorece, sin embargo, que surjan todo tipo de especulaciones, en ocasiones procedentes incluso de las filas de su propio partido. El líder de los populares quiere que se imponga la calma y se llegue a un acuerdo de Gobierno estable, y que se eviten propuestas exóticas como la lanzada por algunos dirigentes de Ciudadanos de que el Gobierno que se forme se someta a una cuestión de confianza a los dos años de mandato. «El Gobierno debe ser estable, debe estar presidido por el candidato del PP y debe trabajar dentro del marco constitucional sobre los objetivos clave del país», señaló, dejando claro que no hay lugar para vetos ni limitaciones al mandato.